Julien_Skiles
Member
- Registrado
- 27 Sep 2024
- Mensajes
- 43
Para los pesimistas, para los enojados, para los que creen que España se hunde y la civilización no puede salvarse. Para los que de todo se quejan y no ven la luz, ni el bienestar, ni la esperanza. Derrotamos a ETA, derrotamos a los independentistas, Albert Rivera es un implante, Rosa Díez una peluquera, Pablo Iglesias un barman. Monedero la majorette de Maduro y Yolanda Díaz tan ridícula que hay que ir despacio para no ensañarse. Íñigo Errejón ha dejado la política. La victoria del sistema ha sido absoluta. Imperfecta como toda empresa humana, pero apabullante en fondo y forma y hay que estar podrido para no celebrarla. Cuando Errejón dice que «he llegado al límite de la contradicción entre el personaje y la persona» sabe que le hemos ganado. Con el mercado, con la libertad, con el alma. Con todo lo que negaba cuando empezó a hacer política y no ha tenido más remedio que aceptar. No se ha retirado. Lo hemos retirado. Que Errejón admita llevaba una vida «neoliberal» siendo «portavoz de una formación que defiende un mundo nuevo» es el capitalismo pagando a todos un poco para que las comodidades aplaquen a las revoluciones. Somos nosotros. El reverso de la propiedad es el miedo a perder y de ahí el invento. La propaganda de la Iglesia es el amor pero su negocio es el temor de Dios y es la empresa más antigua y próspera. Que pienses que con 5.000 euros al mes puedes llevar una vida «neoliberal» también somos nosotros, y con especial dedicatoria. Y lo del «mundo nuevo», Íñigo, ¡ay, cuando te des cuenta!La vieja política pervive y se han oxidado las guillotinas. Si no estuviéramos tan atrofiados de excedente, daríamos gracias por haber nacido en la parte afortunada de la Tierra, por vivir tan bien en una democracia liberal pero compensada en la que nadie queda atrás y los apocalípticos para justificar su rabia tiene que inventarla y luego dimitir cuando todo el mundo ve que era un engaño.Hemos elegido estar tristes y yo os digo que despreciar los dones es pecado. Cuando veo el rostro sombrío, chupado, de Aznar pienso con piedad que él y yo no vamos a los mismos restaurantes. Es cursi y afectado exagerar el drama. Está por debajo de tu dignidad ser un ingrato. Errejón dimite enredado por una absurda acusación feminista – me siento agredida pero me meto en un coche para ir a tu casa – y tú estás enfadado. Antes la derecha celebrábamos más, estábamos más contentos, éramos más generosos, no hablábamos tanto de desgracias. Dábamos una fiesta por cualquier cosa y no era tan fácil cogernos con la guardia baja. Mira ahora. Todo el día refunfuñando como un mozo de caballerizas al que no le han subido el salario.Los indignados de las plazas están comprando billetes baratos a Nueva York para pasar el fin de año. Ada Colau, Manuela Carmena o Kichi el de Cádiz se marchitan en sus carteles descolgados y nuestras voces roncas de tantas carcajadas –Panero lo dice– son el extraño conjuro que afirma que aún vivimos.
Cargando…
www.abc.es