El secretario general del PSOE madrileño, Juan Lobato, se ha visto envuelto en la polémica que rodea al caso de las filtraciones de los correos intercambiados entre la Fiscalía y el abogado de Alberto González Amador, pareja de la presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso.
Según las informaciones publicadas por ABC, la jefa de gabinete de Óscar López (entonces jefe de gabinete de Pedro Sánchez y actualmente ministro), Pilar Sánchez Acera, habría filtrado esa información a Juan Lobato con la intención de que el portavoz utilizase esas filtraciones en el pleno de la Asamblea de Madrid.
Lobato, citado ahora como testigo en la causa del Supremo contra el fiscal general del Estado por esas filtraciones, acreditó ante notario, según reveló ABC y corroboró él mismo más tarde, la conversación de WhatsApp con la asesora de Moncloa y las informaciones filtradas.
Lobato acudió al notario sin avisar a nadie para dejar registro de las conversaciones
El propio Lobato aseguró en un post en la red social Bluesky que acreditó ante notario que las informaciones relativas a la pareja de Díaz Ayuso procedían de medios de comunicación, y para dejar constancia que "ni los socialistas madrileños ni Moncloa habíamos recibido de la Fiscalía ninguna información en absoluto relativa" a ese caso.
Lobato reconoció a ABC las comunicaciones entre él y Sánchez Acera y que, cuando se abrió el caso en el Supremo que terminó con la imputación del Fiscal General del Estado, acudió al notario sin que nadie lo supiera para dejar registro de que "ni a mí ni a Pilar Sánchez Acera nos llega ninguna información por parte de la Fiscalía, sino que esa información ya la tenían los medios de comunicación". Además, el portavoz socialista aseguró este lunes que lo hizo porque tenía "clarísimo" que sería citado a declarar en el proceso del Supremo.
Las conversaciones de WhatsApp presentadas por Lobato ante notario datan del 14 de marzo de 2024 y constaría de documentos enviados por Sánchez Acera que, según el propio líder del PSOE madrileño, ya habían sido publicados por medios de comunicación, además de "recortes de prensa" o enlaces. Lobato ha rechazado hacer pública el acta notarial de la conversación al afirmar que "es una conversación privada, y su finalidad no es publicarla".
La comparecencia de este martes
Lobato, en su comparecencia de este martes, ha asegurado que "no contempla" que Sánchez Acera, le mintiera sobre el origen del correo de la defensa de González Amador y el ministerio público, informa Mónica Tragacete. "No contemplo que fuera falso lo que se me dijo, porque si fuera falso que el origen de esa documentación eran los medios de comunicación sería bastante grave", ha aseverado. Un origen ajeno a la prensa supondría que la Fiscalía habría enviado la documentación a Moncloa, lo que complicaría el futuro judicial de Ortiz, algo que también habría tenido consecuencias para Lobato, según ha aseverado él mismo.
Lobato no pensaba hacer ninguna declaración pública sobre el asunto del notario hasta que declarara en el Supremo, según había trasladado su equipo, pero tan solo unas horas después de ese pretendido cerrojazo informativo -decisión que se tomó tras una intensa ronda de entrevistas- ha salido a defender de nuevo su decisión de acudir al notario y que, según confesó este lunes, no consultó con nadie
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