Germaine_Wolff
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La victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales norteamericanos es también la derrota de un progresismo catalán que fundamentalmente aparece –PSC y Comunes- en las izquierdas del «país». El electorado estadounidense prefiere tener el plato lleno –pizzas, hamburguesas, 'chowders', 'snachs', pasteles de manzana y bebidas azucaradas- a disfrutar del caldo woke –a la manera catalana- que habla de la identidad, la diferencia, los derechos LGBTQ+, la política trans, las matemáticas con perspectiva de género, el empoderamiento o el derribo de la estatua del racista Cristóbal Colón. El electorado estadounidense ya está harto de este fundamentalismo y sectarismo woke que es una muestra del autoritarismo y el papanatismo que nos rodea. Sospecho que a una parte de la ciudadanía catalana –española- le ocurre lo mismo. Sobre todo, cuando oye a la gente –esos pesados- del PSOE, Sumar, Podemos o Más Madrid. Frente al woke que nos amenaza, recomiendo la lectura de un manifiesto, aparecido en el magazín 'Harper´s', con el título 'Letter on Justice and Open'. No se preocupen, está traducido con el nombre Una carta sobre justicia y debate abierto. El manifiesto, firmado por más de 150 intelectuales (entre ellos: Martin Amis, Margaret Atwood, Noam Chomsky, Michael Ignatieff , Enrique Krauze, Steven Pinker, Salman Rushdie o Michael Walzer) nos habla «del clima intolerante que se ha establecido», de ese «debilitar nuestras normas de debate abierto y de tolerancia hacia las diferencias en favor de la conformidad ideológica», de «una intolerancia de puntos de vista opuestos, una moda por imponer la vergüenza pública y el ostracismo y la tendencia a disolver cuestiones políticas complejas con una certitud moral, cegadora».Noticia Relacionada estandar Si Pánico en Washington por los planes de Trump de desmontar el Estado David Alandete | Washington Se esperan despidos masivos y la reubicación forzosa de cientos de miles de funcionarios federalesLos firmantes del manifiesto –que recibió el apoyo de intelectuales españoles entre los cuales se encuentra Sergi Pàmies - concluyen que «esta atmósfera sofocante dañará en última instancia las causas más vitales de nuestro tiempo». La contundente victoria de Donald Trump –conste en acta: no me gusta Donald Trump ni tampoco Kamala Harris- es la respuesta ciudadana a ese sectarismo prepotente y despótico que también se percibe en la Unión Europea, España y Cataluña. El woke local ha perdido la batalla en Estados Unidos. Pero –sospecho-, seguirán ahí. Con su insoportable superioridad moral. Inasequibles al ridículo y el desaliento. Paciencia.
Miquel Porta Perales: Papanatismo
La contundente victoria de Donald Trump –conste en acta: no me gusta Donald Trump ni tampoco Kamala Harris- es la respuesta ciudadana a ese sectarismo prepotente y despótico que también se percibe en la Unión Europea, España y Cataluña
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