Ni el frutero ni la nevera: el lugar donde deberías dejar los plátanos para que no se estropeen

[wrosenbaum]

Los plátanos son una fruta básica en la cocina de muchísimos hogares en España y en todo el mundo. No es para menos; su sabor dulce, su versatilidad tanto para hacer recetas dulces como saladas, y sus propiedades nutricionales lo convierten en un superalimento para muchos.

Sin embargo, conservarlos correctamente puede ser todo un desafío, ya que suelen madurar muy rápido y pueden estropearse antes de que se lleguen a disfrutar. Aunque el frigorífico y el frutero son las opciones más habituales para guardarlos, no siempre son las más adecuadas para evitar que acaben en la basura.

¿Dónde guardar los plátanos?​

Lo ideal es conservar los plátanos a temperatura ambiente, en un sitio fresco y que esté bien ventilado. Por eso, ponerlos en una cesta o colgarlos en un gancho son opciones buenas que ayudarán a conservarlos por más tiempo. Además, es importante mantenerlos alejados de otras frutas como manzanas o peras, ya que estas liberan etileno, un gas natural que acelera el proceso de maduración de la fruta, poniéndo los plátanos negros en cuestión de días.

Aunque muchas personas creen que el frigorífico es un buen lugar para conservarlos, el frío puede hacer que la piel se oscurezca rápidamente, dándoles un aspecto que resulta poco apetecible, aunque la fruta en su interior aún esté buena.

Por otro lado, como decíamos un poco más arriba, dejarlos en el frutero junto con otras piezas que tienen grandes cantidades de etileno va a llevar a una maduración acelerada de los plátanos. Por eso, encontrar un lugar intermedio, fresco, pero no frío, es lo más importante. Por ejemplo, una despensa es un buen espacio donde dejar los plátanos.

Conservar los plátanos por más tiempo​

Para conservar los plátanos por más tiempo cuando no se van a consumir rápidamente, un truco muy efectivo es envolver el tallo del racimo con papel film. Esta técnica, que es super sencilla, ayuda a retrasar la liberación de etileno, pero es importante cambiar el plástico si se humedece para conservar su efectividad.

Otra opción para alargar la vida útil de esta fruta es congelarlos. Si están madurando demasiado rápido, tan solo hay que pelarlos, cortarlos en trozos y guardarlos en el congelador. Esto no solo evita que se desperdicien y acaben en la basura, sino que son perfectos para hacer helados, batidos fríos o incluso para recetas de horno como el ‘banana bread’.

¿Hay que tirar los plátanos negros?​

A menudo, para muchas personas el color de la cáscara es motivo de alarma: un plátano que está negro parece ser una señal de que se ha estropeado y ya no se puede comer. Sin embargo, esto no siempre significa que el interior esté en mal estado. De hecho, en muchos casos, ese color negro indica que la fruta está en su punto máximo de dulzura y se pueden hacer pasteles o batidos sin necesidad de añadir azúcar.

Realmente, un plátano está malo si tiene una textura muy blanda, tiene moho o desprende un olor muy desagradable. En estos casos, lo que hay que hacer, es tirarlo a la basura ya que podría suponer un riesgo para la salud si se consume.

Apúntate a nuestra newsletter y recibe en tu correo las mejores novedades para disfrutar al máximo del placer de comer.

Cargando…

www.20minutos.es