Aliya_Little
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La Comunidad de Madrid organizará el próximo mes de marzo los primeros exámenes para conductores de VTC, el servicio de transporte a demanda que tiene en empresas como Uber o Cabify sus buques insignia. La celebración de estas pruebas de conocimientos es fruto del reglamento del sector que aprobó a principios de este año el Gobierno autonómico con el objetivo de ordenar una actividad que ha crecido en los últimos años de forma vertiginosa en España, lo que ha conllevado cierto desorden regulatorio.
La Consejería de Transportes se encuentra ultimando la orden que regulará los ejercicios, cuya superación conllevará la concesión de un permiso para desarrollar la actividad en Madrid con una vigencia inicial de cinco años. El departamento que dirige Jorge Rodrigo ya ha establecido que los exámenes constarán de 60 preguntas que se dividirán en cuatro módulos.
Los conocimientos que tendrán que acreditar los conductores serán muy variados: habrá cuestiones sobre el idioma español, sobre el manejo de dispositivos con mapa de navegación o referentes a itinerarios y destinos de interés de la comunidad. Otras versarán sobre primeros auxilios, accesibilidad y servicio público.
"Se trata de cumplir con el principio de seguridad jurídica de un sector que cuenta actualmente con alrededor de 9.000 autorizaciones en el territorio autonómico", trasladan fuentes de Transportes, que todavía no ha comunicado el número exacto de personas que tendrán que someterse a las pruebas de conocimientos. Podrían ser miles, porque se estima que en la Comunidad hay una media de dos conductores por cada licencia, pero hay que tener en cuenta que el reglamento que se aprobó en enero de 2024 exime de la realización de las pruebas a los conductores que su entrada en vigor vinieran ejerciendo como tales durante al menos un año de forma ininterrumpida, o dos en el período de los cuatro años anteriores a la entrada en vigor de la normativa. Por ello, desde la consejería no descartan tener que reservar aulas en alguna universidad madrileña como lugar más adecuado para celebrar los exámenes.
Los conductores que los superen recibirán de inmediato un permiso electrónico de conductor de VTC provisional, una acreditación similar a la que se recibe cuando se aprueba el examen de conducir. Ese documento será válido hasta que se otorgue el definitivo y tendrá una vigencia máxima tres meses. Tras la vigencia inicial de cinco años del permiso, los conductores tendrán que renovarlo.
La realización de estas pruebas de conocimientos no son las únicas novedades que se introdujeron en el reglamento de VTC que se aprobó el pasado enero en relación a los conductores de los vehículos. La Comunidad también estableció la obligatoriedad de que contaran con el permiso de conducir de la clase B con al menos dos años de antigüedad, así como que carecieran de antecedentes por delitos de naturaleza sexual.
La normativa también obliga a las empresas titulares de las licencias de VTC a que impartan "formación continua" a sus trabajadores "en aras de mejorar los servicios de transporte disponibles para los usuarios" y además permite que, en periodos de alta demanda, puedan convalidarse en Madrid permisos de VTC de otras comunidades autónomas y licencias de taxi de municipios sin necesidad de realizar la prueba específica.
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