runolfsdottir.fanny
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Al llegar a los 50, la vida de las mujeres trae consigo cambios inevitables, con la menopausia como uno de los principales protagonistas. Este proceso natural puede implicar síntomas como aumento de peso, sofocos y retención de líquidos. Pero no todo son malas noticias: la Fundación Española del Corazón afirma que practicar, al menos, 30 minutos de actividad física al día puede aumentar la esperanza de vida hasta cinco años, ofreciendo un enfoque positivo, esperanzador y una mejor calidad de vida.
Esto nos lleva a una cuestión importante: ¿cuáles son los ejercicios más adecuados para las mujeres mayores de 50 años? En Planet Fitness, un gimnasio que acaba de aterrizar en Fuenlabrada (Madrid) convirtiéndose en el 'place to be' de la capital, estas necesidades encuentran respuesta en tres clases especialmente diseñadas para este grupo demográfico, como explican Juan L. Rodríguez-Xuárez Machí y Kiko López Ramos, responsables de su dirección en Alfafar (Valencia).
Entre los 2.000 m2 con los que cuenta Planet Fitness, el gimnasio ofrece tres tipos de clases funcionales diseñadas para cubrir diferentes objetivos de salud y acondicionamiento físico. Según Rodríguez-Xuárez Machí y López Ramos, "no se observa una preferencia clara entre las mujeres de más de 50 años, ya que las tres clases aportan beneficios altamente relevantes para ellas".
Quema grasas, fuerza y core: las tres clases de gimnasio que arrasan entre las mujeres de más 50 años
La clase de quema grasas, por ejemplo, se centra en ejercicios cardiovasculares de alta repetición con descansos cortos. "Este tipo de entrenamiento es ideal para mejorar la resistencia cardiovascular, acelerar el metabolismo, favorecer la pérdida de grasa corporal y contribuir a mantener el corazón sano y prevenir enfermedades como la hipertensión", explican.
Por otro lado, la clase de fuerza utiliza ejercicios que combinan el peso corporal con elementos externos, como bandas elásticas o pesas ligeras. Su propósito, destacan, es "desarrollar fuerza muscular, mejorar la densidad ósea y promover la estabilidad articular, aspectos clave para combatir la pérdida de masa muscular y ósea asociada a la edad, reduciendo el riesgo de osteoporosis", comentan Rodríguez-Xuárez Machí y López Ramos.
La clase de abdominales y glúteos está orientada a fortalecer el core y los glúteos. "Este entrenamiento mejora la postura, el equilibrio y la estabilidad, además de prevenir molestias en la zona lumbar y contribuir a una mejor movilidad y funcionalidad", señalan los responsables.
Qué beneficios psicológicos aportan estas tres clases a las mujeres de más de 50 años
Además de los beneficios físicos, las clases funcionales como las que se imparten en Planet Fitness tienen un impacto positivo en el bienestar emocional de sus participantes. Según los directores de este espacio, esto se debe en gran medida a la filosofía de la marca, basada en un "área libre de críticas" y sin presiones. "La atmósfera inclusiva y de apoyo permite a las mujeres sentirse cómodas mientras entrenan, eliminando la presión de alcanzar estándares inalcanzables y fomentando una experiencia más relajada y satisfactoria", explican.
La reducción del estrés emocional es otro de los beneficios destacados. "La combinación de actividad física y un entorno libre de juicios ayuda a liberar tensiones y a reducir los niveles de cortisol, la hormona del estrés", afirman. Además, el ejercicio incrementa la liberación de endorfinas, las llamadas "hormonas de la felicidad", que contribuyen a mejorar el estado de ánimo.
Otro aspecto valioso es la conexión social que surge en estas clases grupales. "Participar en un grupo permite crear lazos con otras personas que comparten metas similares, generando un sentido de comunidad y pertenencia. Esto es especialmente valioso para mujeres mayores de 50 años", destacan desde la dirección de Planet Fitness.
Las clases también fomentan la autonomía y la motivación personal. "Al respetar el ritmo individual, animamos a las participantes a enfocarse en su propio progreso y a celebrar cada logro, por pequeño que sea. Este enfoque reduce la comparación con otros y fomenta una relación más positiva con la actividad física", exponen.
En conclusión, podemos decir que estas clases están diseñadas para trabajar el cuerpo de manera integral. "Se activan tanto los grandes grupos musculares como los estabilizadores, incluyendo glúteos, piernas, abdominales, espalda y brazos. Este enfoque global asegura un acondicionamiento físico completo, mejorando la coordinación, el equilibrio y la eficiencia de los movimientos", concluyen los expertos.
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