
El Precio voluntario para el pequeño consumidor (PVPC) elevará la protección en 2025 ante posibles subidas bruscas de los precios que se puedan dar durante el ejercicio, como las que se están registrando este mes, y amortiguar así el impacto sobre la factura final de los consumidores. A partir del año que viene, la referencia a los mercados de futuro para la configuración del término de energía de la tarifa regulada pasará del 25% actual al 40%, lo que presupone una mayor estabilidad en los recibos de los hogares y micropymes.
Las facturas del PVPC incorporan referencias de los mercados de futuros desde el 1 de enero de este año y se irán elevando de manera gradual, representando el 25% en 2024, el 40% en 2025 y el 55% en 2026. Hasta este año, la fijación de precios de la energía en el PVPC dependía exclusivamente de la subasta diaria del mercado mayorista organizada por OMIE. En ella, se fijaba cada día un precio del kWh para cada una de las 24 horas del día siguiente. Sin embargo, a partir de este curso se ha añadido a la ecuación el factor de los mercados de futuros. En ellos se tienen en cuenta los precios negociados durante el mes anterior para las compras de electricidad en los mercados con plazo mensual, trimestral y anual.
Este mecanismo suaviza el impacto en las facturas cuando los precios de mercado se disparan. Durante el mes de noviembre se están registrando los más caros del año (debido principalmente a un descenso de la generación renovable y un aumento del precio del gas y el CO2), pero el golpe es menor debido a que la cesta de productos a plazo reduce el precio final del término de la energía, al ser estos valores superiores a los previstos por los futuros, según explica a La Información el subdirector de Selectra, Borja Osta. España registró este martes el precio de la electricidad diario más alto del año y noviembre va camino de convertirse en el más caro del ejercicio.
Efector contrario cuando los precios están a la baja
Por el contrario, cuando los precios de la energía están a la baja, la nueva metodología de cálculo resta atractivo a la tarifa regulada porque los usuarios ven recortado el ahorro. Dicho de otro modo, el nuevo mecanismo de fijación de precios del concepto de la energía cumple su función de evitar picos en el precio de la electricidad, pero también limita que cuando haya horas en que el coste baja mucho, el precio final del kWh para los usuarios lo haga en la misma medida. Por ejemplo, si el precio del kWh a las ocho de la tarde baja de golpe en el mercado diario, los clientes del PVPC ven una bajada más descafeinada en su factura de luz. ¿Por qué? Porque se está teniendo en cuenta no solo esa subasta diaria, sino también el mercado a plazos que puede tener un precio por encima para esa hora.
Osta señala que durante este año este mecanismo de protección ha incrementado el precio del término de energía, ya que si se toman en cuenta las facturas promedio hasta el mes de octubre incluido, este hubiera sido un 8% inferior en caso de no haber existido la referencia del mercado a plazos. "A lo largo de este 2024 hemos tenido meses con precios de récord (a la baja), como el mes de abril, donde al haberse registrado el precio de mercado más bajo de la serie histórica, los futuros quedaron muy por encima de este precio final, aumentando considerablemente el precio para el consumidor", argumenta.
Desde Roams indican también que los precios finales van a ser más estables con el nuevo cálculo, ya que los precios diarios tienen fluctuaciones más abruptas que los precios en el mercado a plazos. "Dado que el objetivo es que el precio de los mercados a futuro tenga cada vez más importancia en la factura, las fluctuaciones en el precio final que abonen los consumidores, serán, en principio, menores. Ahora bien, si los precios de los mercados a plazo aumentan en el futuro -entre otros motivos, por las expectativas de precios más altos del gas o CO2- el impacto podría no ser tan positivo", apuntan desde la plataforma digital que ayuda a los consumidores a optimizar gastos en servicios esenciales como luz y gas. Datos facilitados por la compañía reflejan que el precio medio total en lo que va de 2024 es de 95,50 euros/MWh o lo que es lo mismo 0,0955 euros/kWh. Aplicando la fórmula que entrará en vigor a partir del 1 de enero de 2025, el precio medio sería de de 87,10 euros/MWh o 0,0871 euros/kWh.
Además, indica que si se atiende a la previsión de los futuros para el 2025 y a los precios registrados durante el primer semestre de 2024 es "altamente probable" que este concepto vuelva a encarecer la factura de los consumidores, al ser la previsión "bastante superior" a los precios registrados el año pasado. Hay que tener en cuenta que se sigue instalando capacidad renovable y que, de hecho, ya se ha superado este curso la generación renovable de todo el año anterior. Pese a esto, el subdirector de Selectra considera "totalmente necesario" la existencia de barreras de contención en caso de escalada de precios. En su opinión, si el precio del mercado se dispara, este nuevo elemento actuará de escudo para que no se traslade la subida directamente as los consumidores, como sucedió en el pasado.
Del precio más bajo de la historia a más de 100 euros
Cuando la producción renovable es abundante y hay una demanda contenida, los precios de la electricidad se desploman. España cerró abril con la media mensual más baja de su historia (13,67 euros/MWh) y también se registraron en dicho mes precios negativos por primera vez. Bajo este escenario, los consumidores con un contrato indexado al 'pool', entre ellos, los domésticos con la tarifa regulada o PVPC, pagaron precios extraordinariamente bajos, mientras quienes tenían contratada una tarifa fija en el mercado libre no se beneficiaron de los precios tan bajos. Pasó el tiempo y las horas a precio cero -que no significa que la electricidad sea gratis- en el mercado mayorista de la electricidad se desplomaron en verano respecto a los meses anteriores como consecuencia de una mayor demanda por las altas temperaturas y una menor generación renovable. Los ciclos combinados de gas incrementaron su actividad en la temporada estival encareciendo el precio del 'pool' en las franjas de mayor consumo, trasladando en su mayoría las horas cero a los fines de semana en los momentos con más producción solar fotovoltaica.
Ahora, el precio ha vuelto a dispararse como consecuencia de una menor generación eólica y nuclear, que coincide con un incremento del precio del gas. Los ciclos combinados han vuelto a ganar protagonismo en noviembre con un aumento de la producción y dominando en la fijación de los precios. Según el Grupo ASE, la generación eólica de la primera parte de noviembre ha sido un 60% inferior a su promedio de los últimos cinco años. A ello se ha unido la parada programada de dos centrales nucleares (Ascó I y Ascó II). Asimismo, en esta época del año la aportación fotovoltaica desciende.
Cargando…
www.20minutos.es