La multa que la DGT podría ponerte por llevar esta prenda de vestir conduciendo en invierno

[Kaylin_Douglas]

Con la llegada de las bajas temperaturas a España, existe una prenda que no podemos dejar atrás para combatir el frío polar que nos azota, especialmente, en los meses más gélidos del año. A pesar de la gran utilidad de este utensilio, la Guardia Civil ha comenzado a alertar a los ciudadanos en redes sociales del peligro que puede conllevar hacer un mal uso del mismo, como por ejemplo introducirse en un vehículo con esta prenda puesta.

¿Qué prenda es y por qué es peligroso?​

Cuando la Benemérita explica este peligro, no sólo hace referencia al riesgo que corre el conductor en cuestión, sino que también lo hace para el cuidado de los más pequeños, poniendo el foco, sobre todo, en aquellos que van sentados en la sillita con el abrigo puesto.

En nuestro país, el uso de la sillita es obligatorio hasta que el menor alcance la altura de 135 centímetros, por lo que es fundamental conocer que está completamente prohibido utilizar chaquetas o abrigos mientras los más pequeños están situados en dicha ubicación y el vehículo está en movimiento.

Esto se debe a que la prenda de abrigo, que suele ser acolchada, puede crear un espacio extra entre el niño y las correas de la sillita, haciendo que estas pierdan efectividad. Asimismo, numerosas asociaciones de seguridad han confirmado y denunciado que, en caso de accidente y llevando esta prenda colocada, el pequeño saldría disparado hacia adelante.

¿Cuál es la sanción?​

Además de tener un mal funcionamiento en el caso de los más pequeños, mantener el abrigo colocado en el interior del habitáculo, a corto plazo, nos generará cierto calor y tendremos, quizás, cierta molestia o incomodidad en el momento de la conducción.

En un primer momento, las personas más frioleras les costará deshacerse del abrigo, pero cuando el coche va cogiendo temperatura esta prenda nos sobrará por completo. En el caso de los niños, tendremos que quitársela, siempre y cuando el vehículo esté totalmente detenido y en un lugar seguro, al igual que ocurre con los adultos.

Por último, cabe destacar que si el abrigo en cuestión nos impide movernos libremente en el interior del habitáculo o nos limita la visibilidad, por muy pequeña que sea, las autoridades pertinentes nos podrán multar con una sanción económica de 100 euros.

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