La Junta atiende en nueve meses a más menores en los puntos de encuentro familiar que en todo 2023

[ygottlieb]

Andalucía ha registrado en los primeros nueve meses de este año algo más de 13.450 disoluciones matrimoniales, la mayoría de ellas divorcios, y casi la mitad del total fueron no consensuadas. En algunos de estos casos, cumplir con el régimen de visitas de los hijos menores de edad se convierte en algo especialmente complejo y hasta conflictivo para los progenitores. Y ahí es donde entran en juego los puntos de encuentro familiar (PEF) que gestiona la Junta de Andalucía, que desde 2019 ha ampliado el número de centros y ha mejorado las condiciones de sus trabajadores.

La comunidad cuenta actualmente con 21 PEF, tras la apertura de nueve más en los últimos seis años por parte de la Consejería de Justicia, Administración Local y Función Pública, de la que dependen los centros. Antes solo había un punto en las capitales de provincia, además de Algeciras y Jerez de la Frontera, mientras que ahora hay tres en las provincias de Almería, Cádiz, Córdoba, Huelva y Sevilla; y dos en las de Granada, Jaén y Málaga.

De esta forma, explican desde la Consejería a 20minutos, se puede acercar este servicio a todos los usuarios, aunque no vivan en las grandes ciudades, facilitando también los desplazamientos y garantizando que se cumple lo dictaminado por el juez.

Y es que a este servicio, que es público y gratuito, solo se puede acceder mediante una derivación judicial, que es la que además establece cuál va a ser el régimen de visitas. Entre enero y septiembre de este año, los puntos de encuentro familiar de Andalucía han atendido a un total de 2.290 menores, por los 2.169 que recibieron asistencia en todo el año pasado.

Cuatro tipos de visitas​

La medida tiene un carácter "temporal y excepcional" y, según el decreto que regula los PEF, un periodo máximo de 18 meses para el uso de estos "espacios neutrales", si bien siempre será el juez el que determine el tiempo de duración de la medida.

El equipo de profesionales que trabaja en estos centros está formado por un coordinador en cada provincia y un grupo técnico multidisciplinar, cuyos integrantes deberán estar titulados en Psicología, Pedagogía, Trabajo Social, Educación Social, Derecho y Educación Primaria o Infantil. Asimismo, todos los miembros del equipo deberán contar con formación complementaria en, al menos, alguna de las siguientes materias: mediación, orientación familiar, terapia familiar o violencia de género.

Todos ellos, además de facilitar las visitas entre progenitores y menores, trabajan con las familias para intentar "normalizar" las relaciones y que no tengan que acudir a estos puntos. También ofrecen pautas educativas a los padres y madres para mejorar las relaciones familiares. Y favorecen que los menores puedan igualmente expresar sus necesidades y sentimientos sobre los regímenes de visitas.

Existen cuatro modalidades en lo que al desarrollo de las visitas se refiere. En la primera (entrega y recogida), el equipo técnico supervisa la entrega y recogida de los menores para visitas fuera del punto de encuentro familiar. La segunda son las visitas no tuteladas, que se desarrollan íntegramente dentro del centro sin que sea necesaria la presencia constante de los trabajadores. Si bien estas pueden ser tuteladas, y en este caso, sí hay una supervisión permanente de los profesionales. En ambos casos, los encuentros familiares tienen una duración máxima de dos horas. La última modalidad es la de los acompañamientos, en la que un miembro del equipo acompaña al menor en la visita fuera del PEF, aunque se trata de una opción excepcional, que se adopta previa valoración del equipo técnico y con autorización judicial.

Mejoras en la gestión​

Hasta ahora, los contratos de los puntos de encuentro familiar de cada provincia se gestionaban a través de las delegaciones territoriales, pero la Consejería dirigida por José Antonio Nieto ha decidido unificarlos para dar homogeneidad a los criterios por los que se rigen.

Esta decisión se ha comenzado a desarrollar en los centros de Almería, Cádiz, Granada, Jaén y Sevilla, en las que vencían los contratos con las entidades gestoras, y donde ya han salido a licitación los nuevos contratos, por un importe algo superior a los 3,6 millones de euros, lo que supone un 8% más, para un periodo de dos años.

Estas nuevas contrataciones contemplan una subida salarial del 3,5% para el personal de los PEF y el impulso de la contratación a jornada completa, entendiendo esta como 37 horas semanales y no solo durante el tiempo de apertura de los centros.

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