Jaqueline y Collin Pitkin han pagado este pasado mes de octubre 72 euros de agua en su casa de La Viñuela, un pequeño pueblo de La Axarquía de 2.000 habitantes, que da nombre al principal pantano de la provincia de Málaga. Una factura normal, que nada tiene que ver con la que recibieron hace un año. En octubre de 2023, esta pareja de jubilados británicos, que llevan viviendo más de 20 en este pueblo, recibieron una notificación con 11.800 euros por su gasto de agua. « Es imposible . No puede ser. La propia anchura de los tubos de la casa no tienen caudal como para gastar tanto agua», afirma Collin. Este vecino explica que una vecina alemana recibió una factura de 65.000 euros y que hubo quien llegó a los 88.000 euros en ese trimestre. «Un despropósito» , explica el abogado Rafael Zorrilla, al que una docena de vecinos afectados, la mayoría extranjeros, han acudido para que les ayude a solucionar el entuerto, que se está convirtiendo en una losa ruinosa para los afectados. El Ayuntamiento de La Viñuela, que gobierna el socialista José Juan Jiménez, con el que ha contactado ABC y al que ha dejado una nota esta pasada semana sin obtener respuesta , les dice que deben pagar la factura, pero ellos se niegan. El abogado así lo ha aconsejado antes de poner una denuncia en los Juzgados de Vélez-Málaga en la que piden que se investigue estas elevadas facturaciones por la comisión de un posible delito de prevaricación. Además, de las reseñadas, el abogado presenta facturas 6.000, 12.000, 7.700, 50.000 o 18.900 euros. Gasto hídrico que esta docena de vecinos dice que es imposible que se hayan hecho en solo tres meses . Incluso un matrimonio que no vivía habitualmente en el domicilio llegó a recibir dos facturas de por importe total de 75.000 euros en esta fecha. Para algunos, una ruina. « Es imposible que hayan gastos eso en agua . Los vecinos están angustiados», añade Rafael Zorrilla.«Es imposible. La propia anchura de los tubos no tienen caudal para gastar tanto agua» Collin Pitkin Vecino afectadoHay características comunes entre las viviendas donde se han dado estas facturaciones. «Todos los vecinos tienen su vivienda en alto, tienen una estación de bombeo para que les llegue el agua con presión a la casa y, además, se les cambio el contador por unos nuevos que instaló el Ayuntamiento meses antes de esa lectura», reseña a ABC el mediador Jesús Collado, que está ayudando a este grupo de vecinos a solucionar el problema y que señala que tres vecinos extranjeros, ante las complicaciones que están encontrando ya han vendido las propiedades y se han marchado de La Viñuela a otro lugar dejando la deuda al comprador. Los que no han se han ido se han levantado en pie de guerra para demostrar que el problema es un error en las lecturas de esos contadores. Según la denuncia presentada en el juzgado, a la tiene acceso ABC, el problema es estos aparatos no discriminan entre agua o aire. Fluidos o gas, remarca el perito que ha hecho las evaluaciones. Al no leer solo el agua , cuenta todos los flujos que pasan (líquido y gas) y la bolsas de aire de las estaciones de bombeo, así como de las filtraciones en las antiguas canalizaciones del municipio dan lugar a un exceso de medición. Eso es lo que se traduce en facturas de agua desorbitadas de miles de euros por su agua. A eso ayuda un precio de 32 euros en su tramo más caro del metro cúbico de agua y una limpieza de los depósitos, que los vecinos creen que llenaron de gases las tuberías. «Para arreglarlo hay que verificar el contador, pero el Consistorio te cobra 300 euros, cuando una empresa te lo hace solo por 42 euros», apunta Collado.Y con esas mimbres los vecinos quisieron reclamar, pero nadie les escuchó. Lo primero que hicieron fue ir al Ayuntamiento para saber cómo era posible recibir esa factura de agua. Les dijeron que era suya y había que pagarla, así que lo siguiente fue organizarse en un grupo de Facebook para poder reclamar todos juntos, incluso saber cuántos afectados había por este problema de los contadores. Se les insistía en que debían pagar la factura , pero era demasiado dinero para abonar la cuenta y callarse, obviando que algo no estaba funcionando. Así que decidieron pasar a abrir una guerra contra el Consistorio.«Alguien tiene que ver que es un disparate, tiene que haber alguien que entienda que es imposible» Jaqueline Pitkin Vecina afectadaSegún los afectados, como el gobierno local no les hacía caso, se fueron a la oposición para buscar ayuda. Fueron los tres concejales del PP los que decidieron pedir un pleno extraordinario para tratar la facturación excesiva del agua a varios vecinos. El equipo de gobierno denegó la convocatoria, pero metió el debate en un pleno el 28 de diciembre, Día de los Santos Inocentes, como último punto del orden día. Ahí los vecinos expusieron sus problemas, pero lo máximo que consiguieron fue que se les recomendara hacer un aplazamiento del pago de las facturas. «No he pagado nada, pero la deuda está» , dice Collin Pitkin. Los vecinos se organizaron, han presentado escritos al Consistorio pidiendo que revise las facturas y hasta llegaron a manifestarse para pedir ser escuchado por el alcalde ante este problema, que les genera un importante agujero económico. Así durante un año, hasta que ya ha acudido al juzgado esperando a que sea un magistrado el que vea que lo que está ocurriendo se sale de toda normalidad y que tienen razón en que es imposible que hayan generado este gasto de agua. «Alguien, en algún lugar, tiene que haber que vea que esto no es posible, que no es correcto. Debe haber alguien que entienda que esto es un disparate», afirma desesperada Jackie Pitkin.
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