La edad de los cuidadores es clave en la alimentación de los perros, según un estudio

lcollins

New member
Registrado
27 Sep 2024
Mensajes
53
perro-pastor-aleman-pienso-seco-comida-goodfon.jpeg

Un reciente estudio del Dog Aging Project (DAP), publicado en el Journal of the American Veterinary Medical Association, ha revelado que la edad de los titulares y cuidadores influye significativamente en la elección de la dieta de sus perros, por encima de otros factores como el nivel de ingresos o educación. Estos hallazgos aportan una nueva perspectiva a la relación entre las características demográficas de los convivientes con perros y las decisiones nutricionales que toman para sus mascotas, un aspecto que, hasta ahora, había sido poco explorado.

El Dog Aging Project es una iniciativa científica comunitaria, impulsada por investigadores de la Universidad Texas A&M y del Virginia-Maryland College of Veterinary Medicine, que estudia el envejecimiento de los perros y los factores que contribuyen a una vida larga y saludable. Con más de 50.000 perros inscritos en Estados Unidos, el proyecto permite analizar grandes poblaciones caninas para identificar patrones relacionados con su salud y bienestar, que también podrían tener implicaciones en la salud humana.

La edad del cuidador y la dieta del perro​


Según los datos recopilados de más de 40.000 responsables de perros, adscritos al programa de DAP, el estudio determinó que la edad de las personas responsables tiene una relación directa con la dieta de los animales. “Descubrimos que las características demográficas desempeñan un papel mucho más importante en la elección de la dieta de lo que pensábamos”, explica en la nota de prensa Katie Tolbert, veterinaria especialista en nutrición y profesora en la Universidad Texas A&M.

El estudio mostró que los cuidadores más jóvenes tienden a alimentar a sus perros principalmente con pienso comercial seco, mientras que los cuidadores mayores de 45 años tienen más inclinación a optar por dietas caseras, ya sean cocinadas o crudas. “Inicialmente podríamos asumir que los perros más viejos reciben dietas blandas porque tienen más necesidades relacionadas con la edad, pero nuestros datos sugieren que esta elección podría estar más ligada a que sus cuidadores también son mayores y creen que estas opciones son más saludables para sus mascotas”, añade Tolbert.

Otros factores que influyen en la elección de dieta​


Además de la edad del responsable, el estudio identificó otros factores asociados con la dieta canina, como el tamaño del perro y su nivel de actividad. Los perros pequeños, por ejemplo, son más propensos a recibir dietas húmedas o caseras debido a su menor coste en comparación con alimentar a perros grandes con estas opciones. Asimismo, los perros activos, deportistas y de trabajo, especialmente en entornos rurales, son alimentados con más frecuencia con dietas crudas o cocinadas en casa, mientras que los perros sedentarios o aquellos que viven en entornos urbanos tienden a recibir alimentos comerciales enlatados.

En cuanto a las dietas crudas, el estudio identificó que son más comunes entre los perros de pura raza, no esterilizados y aquellos con un rol activo, como perros de servicio, de terapia o de competición. No obstante, los investigadores advierten sobre los riesgos de estas dietas, especialmente el que supone en perros de terapia que interactúan con personas inmunocomprometidas, debido al peligro de zoonosis por bacterias como la Salmonella o la Escherichia coli.

Motivaciones y salud canina​


El estado de salud del perro también resultó ser un factor determinante. Los cuidadores de perros con problemas de salud crónicos tienden a optar por dietas alternativas al pienso seco, como dietas caseras más palatables o prescritas por veterinarios para atender condiciones médicas específicas. En palabras de Tolbert, “es posible que los titulares que perciben a sus perros en peor estado de salud opten por cambiar su dieta en un intento de mejorar su calidad de vida”.

Por otro lado, los resultados también sugieren que la ubicación geográfica juega un papel relevante. En California, donde la vida es más urbanita y hay un acceso fácil a productos variados, el 26% de los cuidadores opta por dietas diferentes al pienso tradicional para sus perros, mientras que en Kansas, que es una región más rural y centrada en actividades agrícolas, solo el 7% de los convivientes con perros elige alternativas al pienso seco.

Implicaciones para la investigación veterinaria​


Los autores del estudio subrayan que estos hallazgos ponen de manifiesto la necesidad de considerar tanto las características del perro como las de su cuidador al investigar el impacto de la nutrición en la salud canina. “Si no tenemos en cuenta los factores demográficos de los responsables, es probable que no estemos viendo el cuadro completo”, señala Tolbert.

La investigación también enfatiza que los estudios nutricionales deben ajustar sus análisis para evitar sesgos relacionados con variables demográficas. Por ejemplo, un estudio que compare la salud de perros alimentados con pienso y perros con dietas caseras debe considerar el tamaño del perro y la edad del responsable humano, ya que estos factores pueden influir en los resultados. Este conocimiento puede resultar clave para que veterinarios y especialistas en nutrición ofrezcan asesoramiento más personalizado y eficaz, promoviendo así una mejor salud y calidad de vida para los perros.

Referencia:​

  • Dog and owner demographics impact dietary choices in Dog Aging Project cohort. Janice S. O’Brien y equipo. Journal of the American Veterinary Medical Association (2024)

 

Miembros conectados

No hay miembros conectados.
Atrás
Arriba