Hartos de 'El juego del calamar' antes de ver la segunda temporada

Ashlee_Turcotte

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Ya habían mostrado su disconformidad cuando se anunció el acuerdo publicitario, no les gustó un pelo ver el estadio convertido en una especie de plató televisivo antes del partido de Liga en el que les visitaba un histórico — Liverpool —, pero la gota que colmó el vaso del enfado fue llegar al descanso de dicho partido y, perdiendo 1-3, asistir de nuevo a la invasión de unos seres enmascarados disfrazados con monos rosas. Los aficionados del Tottenham Hostspurs no aprueban la operación que ha unido al club inglés y a la plataforma televisiva Netflix en la promoción de la segunda temporada de la popular serie coreana 'El juego del calamar', estrenada este jueves 26 de diciembre en todo el mundo.El citado encuentro acabó con goleada (3-6) a favor del líder de la clasificación, resultado que unido a las imágenes de esos numerosos y llamativos personajes de la serie de televisión repartidos por el Tottenham Hotspur Stadium derivó en numerosas y amargas quejas en las redes sociales de seguidores del conjunto londinense.Además, está anunciada la repetición de una acción publicitaria similar para el próximo domingo 29 de diciembre en el siguiente partido liguero como local, esta vez ante el Wolverhampton . Si nada cambia, además de los enmascarados de rosa, un dirigible gigante de la muñeca Young-hee —con protagonismo principal en la serie— volverá a sobrevolar el campo de los Spurs. La primera temporada del thriller coreano, emitida en 2021, se convirtió en la serie más vista de la historia de la plataforma televisiva y, por tanto, en un fenómeno mundial. Y eso es lo que ha querido aprovechar el Tottenham, que también emitió (el día 22) y emitirá (el 29) en las pantallas de su estadio el tráiler de la recién estrenada secuela durante el intermedio de los partidos.«'El juego del calamar 2' será sin duda uno de los programas más comentados durante el período festivo navideños y nuestra asociación con Netflix coloca al club en el centro de la cultura popular», argumenta Ryan Norys , director de ingresos del Tottenham.«Esta es otra forma emocionante de mejorar la experiencia del día del partido y ofrecer a nuestros aficionados contenido nuevo y atractivo a través de canales digitales», añade.No lo ven así muchos de esos seguidores. La mayoría de los críticos abogan porque la directiva concentre sus esfuerzos de gestión en la parcela deportiva y no en la promocional. Justifican el razonamiento en el desarrollo de la temporada. En la Premier , el equipo circula por el centro de la tabla, sin emitir señales claras de aspirar a colarse en la zona alta. Y en el nuevo formato de la Europa League es noveno, lo que le permite tener opciones de meterse entre los ocho primeros y pasar directamente a la fase de octavos.Algunos seguidores más dramáticos afinan todavía más y consideran incluso de mal gusto unir el nombre del Tottenham con el de 'El juego del calamar', una serie cuyo guión describe una competición en la cual los participantes menos hábiles o afortunados van siendo eliminados de manera fulminante: mueren. Comparan a esos desafortunados perdedores con las derrotas y malas rachas del club de sus amores.Desde hace años, mucho antes de esta reciente polémica, viene germinando y creciendo en el club londinense un movimiento de oposición popular contra el máximo propietario, Daniel Levy. El lema utilizado en los actos reivindicativos, «Levy out (Levy fuera)» es recurrente, y ahora algunos de esos críticos han aprovechado los disfraces de 'El juego del calamar' para insistir en sus quejas y su mensaje.

 

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