Está en Netflix, la puedes ver en una tarde y se convertirá en tu serie navideña favorita

[mclaughlin.fabian]

Nueva York en Navidad: ella la ama, él la odia. Ambos se conocen y se enamoran, pero nunca se han visto en persona, se comunican y tienen citas a través de una libreta roja que, como hilo rojo, les conecta y les lleva por los sitios favoritos del otro. ¿Necesitas algo más para querer ver esta serie? Bueno, pues salen los Jonas Brothers.

Dash & Lily es la miniserie que va a convertirse en tu imprescindible navideño si te gustan las comedias románticas, y la Navidad, claro. Está en Netflix, tiene ocho capítulos de entre veinte minutos y media hora cada uno y es una mezcla entre Tienes un e-mail (Nora Ephron, 1999) y Serendipity (Peter Chelsom, 2001).

La "serendipia" se define como "hallazgo valioso que se produce de manera accidental o casual", y en Serendipity, John Cusack y Kate Beckinsale se conocen casualmente en Navidad, por supuesto, en un centro comercial cuando ambos quieren llevarse el mismo y último par de guantes. Desde el primer momento, ambos sienten conexión, pero, también, ambos tienen pareja, por eso deciden cortarla antes de que vaya a más, no sin antes darse los números de teléfono en un billete —con el que pagan una compra— y en un libro —que ella vende en una tienda de segunda mano—, y dejar que el destino haga el resto. En Tienes un e-mail, Tom Hanks y Meg Ryan son enemigos profesionales, pero, lo que no saben, es que en realidad mantienen una relación por correo electrónico.

Y de esta mezcla surge Dash & Lily, la adaptación del bestseller El cuaderno de los desafíos de Dash & Lily, de Rachel Cohn y David Levithan. Dash (Austin Abrams) es un cínico niño rico que odia la Navidad y que tiene que pasar las fiestas solo. Lily (Midori Francis), en cambio, es una fan absoluta de estas fiestas y de todos los planes navideños neoyorquinos que a Dash sacarían de quicio. Sin embargo, su ilusión se rompe cuando recibe una impactante noticia de su familia y las fechas que tanto ama se convierten en algo muy diferente a lo que ella esperaba.

Para animarse, e incitada por su hermano, deja en una estantería de su librería favorita un cuaderno rojo lleno de desafíos para que la persona indicada lo encuentre. Resulta que esa persona termina siendo Dash y, en contra de sus principios, acepta el reto. Así, ambos viven un intenso intercambio de juegos, deseos y sueños a través del cuaderno que les lleva por el desconocido Nueva York del otro. Pero, también, a conocerse, a sincerarse, a compartir inquietudes y, finalmente, incluso a enamorarse.

Todo es posible en Navidad, o eso canta Bisbal, sin embargo, pronto, Dash y Lily se darán cuenta de que la vida real es más que un juego, que todo es mucho más complicado, que son muy diferentes y que hasta en unas fiestas tan señaladas puede acabarse la magia.

Si quieres añadir otro título a tu lista de "lugares seguros" estas navidades al lado de Love Actually (Richard Curtis, 2003) o The Holiday (Nancy Meyers, 2006), Dash & Lily es lo que estás buscando.

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