Trey_Ritchie
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“Como algunos de ustedes saben, he tenido problemas y ahora he perdido la vista. No he podido ver la actuación, pero la he disfrutado. Sonó bien esta noche”. Con estas palabras, el cantante británico Elton John, de 77 años, se dirigió este domingo al público presente en el estreno del musical El diablo viste de Prada —del que ha escrito la banda sonora— en el teatro The Dominion en el West End de Londres (Inglaterra). Este verano, el intérprete de I’m Still Standing, Tiny Dancer o Rocket Man ya había contado en su cuenta de Instagram que sufría una infección ocular y que, como consecuencia, había perdido visión en su ojo derecho. Sin embargo, no ha sido hasta este 1 de diciembre cuando el propio artista ha contado la pérdida total de visión. “Como algunos de ustedes sabrán, he tenido problemas y ahora he perdido mi vista. No he podido ver la actuación, pero la he disfrutado”, le dijo desde el escenario a los espectadores.
“Hace cuatro meses que no puedo ver y mi ojo izquierdo [el que estaba sano en verano] no está en su mejor estado. Tengo esperanza y ánimo de que todo irá bien, pero en este momento estoy un poco estancado”, se sinceró también Elton John, según unas declaraciones recogidas por el Daily Mail. A lo que añadió que esta situación ha puesto en peligro el futuro de su carrera: “Puedo hacer esto [ir a estrenos o posar en las alfombras rojas], pero ir al estudio y grabar no lo sé porque, para empezar, no puedo ver la letra de las canciones”.
El cantante fue acompañado al estreno teatral por su esposo, David Furnish (62 años), con quien se casó en 2005, cuando el matrimonio entre personas del mismo sexo se legalizó en el Reino Unido. Furnish le asistió tanto dentro como fuera del escenario. Y, en su discurso, el cantante agradeció a su pareja su ayuda durante los últimos meses: “A mi marido, que ha sido mi apoyo, mi roca”. También quiso añadir una broma sobre su presencia en el estreno a pesar de su pérdida de visión. En la alfombra roja previa a la función, el artista fue guiado por Furnish, director y productor de cine. Y, a pesar de su situación, Elton John no mostró ninguna preocupación y posó alegremente para las fotografías promocionales del lanzamiento del musical en la capital británica. Con zapatillas rojas brillantes y unas llamativas gafas rojas —complemento indispensable del legendario artista británico—, charló durante el evento con varios rostros famosos. Entre ellos, su amiga y diseñadora Donatella Versace; Vanessa Williams, que interpreta en el musical a la editora de moda, Miranda Priestly; y la actriz Elizabeth Hurley. También estuvo presente la todopoderosa editora de Vogue Anna Wintour, quien según se ha rumoreado durante años fue la inspiración para crear el personaje de Priestly.
El creador del éxito I’m still standing reveló sus problemas de visión en septiembre a través de una extensa publicación en su cuenta de Instagram. “Durante el verano, he estado lidiando con una infección ocular grave que lamentablemente me ha dejado con visión limitada en un ojo”, explicaba entonces. “Me estoy recuperando, pero es un proceso extremadamente lento y pasará algún tiempo antes de que la vista vuelva al ojo afectado”. También dedicó unas palabras de agradecimiento al personal médico que le atendió y a su familia: “Estoy muy agradecido con el excelente equipo de médicos y enfermeros y con mi familia, que me han cuidado durante las últimas semanas”. Finalizó el mensaje con estas palabras: “He estado recuperándome durante el verano tranquilamente en casa y me siento optimista sobre el progreso que he logrado en mi curación y recuperación hasta ahora”.
El mes pasado, en una charla con ABC News para promocionar su nuevo documental Elton John: Never Too Late, que se estrenó el pasado 15 de noviembre en Disney+, admitió que no estaba seguro de su capacidad para grabar música nueva porque estaba enfocado en cuidar de su salud. En la entrevista no desveló que había perdido totalmente la vista, solo se refirió a la infección ocular de su ojo derecho: “Hace tiempo que no hago nada. Desafortunadamente, perdí la vista en mi ojo derecho en julio porque tuve una infección en el sur de Francia”.
Durante el documental, el cantante también reflexiona sobre su propia mortalidad, su familia —formada por su marido y sus dos hijos: Zachary, de 13 años, y Elijah, de 11— y su futuro. “Me preguntó qué va a pasar con todo esto cuando termine”, afirma ante la cámara haciendo referencia a su carrera y sus pertenencias. “Esta es la última etapa de mi vida. No sé cuánto tiempo me queda”. También añadía unas reflexiones sobre su salud y su futuro inmediato: “Quiero ver a nuestros hijos casarse, pero no creo que pueda estar presente para eso”. Antes estas declaraciones, Furnish añadía en la grabación: “Eso realmente me molestó, porque en mi mente creo que Elton va a vivir para siempre, todos pensamos eso. Él es tan vibrante que es algo fácil de creer, pero su situación te obliga a enfrentar otra realidad”.
Elton John, tras más de 40 discos, una carrera de éxito desde los años setenta basada en la excentricidad y canciones interpretadas al piano, realizó su gira de despedida, Farewell Yellow Brick Road, entre 2018 y 2023, porque quería centrarse en su familia y en cuidar su salud. La última actuación del cantante fue durante el festival de música de Glastonbury (Reino Unido) el pasado 26 de junio. Además de sus problemas de visión, se ha enfrentado otros problemas de salud como un reemplazo de ambas rodillas y de la cadera derecha tras una caída (lo que le obligó a retrasar su gira de despedida en 2021), una diabetes tipo 2 a principios de los 2000 y un cáncer de próstata en 2017.
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“Hace cuatro meses que no puedo ver y mi ojo izquierdo [el que estaba sano en verano] no está en su mejor estado. Tengo esperanza y ánimo de que todo irá bien, pero en este momento estoy un poco estancado”, se sinceró también Elton John, según unas declaraciones recogidas por el Daily Mail. A lo que añadió que esta situación ha puesto en peligro el futuro de su carrera: “Puedo hacer esto [ir a estrenos o posar en las alfombras rojas], pero ir al estudio y grabar no lo sé porque, para empezar, no puedo ver la letra de las canciones”.
El cantante fue acompañado al estreno teatral por su esposo, David Furnish (62 años), con quien se casó en 2005, cuando el matrimonio entre personas del mismo sexo se legalizó en el Reino Unido. Furnish le asistió tanto dentro como fuera del escenario. Y, en su discurso, el cantante agradeció a su pareja su ayuda durante los últimos meses: “A mi marido, que ha sido mi apoyo, mi roca”. También quiso añadir una broma sobre su presencia en el estreno a pesar de su pérdida de visión. En la alfombra roja previa a la función, el artista fue guiado por Furnish, director y productor de cine. Y, a pesar de su situación, Elton John no mostró ninguna preocupación y posó alegremente para las fotografías promocionales del lanzamiento del musical en la capital británica. Con zapatillas rojas brillantes y unas llamativas gafas rojas —complemento indispensable del legendario artista británico—, charló durante el evento con varios rostros famosos. Entre ellos, su amiga y diseñadora Donatella Versace; Vanessa Williams, que interpreta en el musical a la editora de moda, Miranda Priestly; y la actriz Elizabeth Hurley. También estuvo presente la todopoderosa editora de Vogue Anna Wintour, quien según se ha rumoreado durante años fue la inspiración para crear el personaje de Priestly.
El creador del éxito I’m still standing reveló sus problemas de visión en septiembre a través de una extensa publicación en su cuenta de Instagram. “Durante el verano, he estado lidiando con una infección ocular grave que lamentablemente me ha dejado con visión limitada en un ojo”, explicaba entonces. “Me estoy recuperando, pero es un proceso extremadamente lento y pasará algún tiempo antes de que la vista vuelva al ojo afectado”. También dedicó unas palabras de agradecimiento al personal médico que le atendió y a su familia: “Estoy muy agradecido con el excelente equipo de médicos y enfermeros y con mi familia, que me han cuidado durante las últimas semanas”. Finalizó el mensaje con estas palabras: “He estado recuperándome durante el verano tranquilamente en casa y me siento optimista sobre el progreso que he logrado en mi curación y recuperación hasta ahora”.
El mes pasado, en una charla con ABC News para promocionar su nuevo documental Elton John: Never Too Late, que se estrenó el pasado 15 de noviembre en Disney+, admitió que no estaba seguro de su capacidad para grabar música nueva porque estaba enfocado en cuidar de su salud. En la entrevista no desveló que había perdido totalmente la vista, solo se refirió a la infección ocular de su ojo derecho: “Hace tiempo que no hago nada. Desafortunadamente, perdí la vista en mi ojo derecho en julio porque tuve una infección en el sur de Francia”.
Durante el documental, el cantante también reflexiona sobre su propia mortalidad, su familia —formada por su marido y sus dos hijos: Zachary, de 13 años, y Elijah, de 11— y su futuro. “Me preguntó qué va a pasar con todo esto cuando termine”, afirma ante la cámara haciendo referencia a su carrera y sus pertenencias. “Esta es la última etapa de mi vida. No sé cuánto tiempo me queda”. También añadía unas reflexiones sobre su salud y su futuro inmediato: “Quiero ver a nuestros hijos casarse, pero no creo que pueda estar presente para eso”. Antes estas declaraciones, Furnish añadía en la grabación: “Eso realmente me molestó, porque en mi mente creo que Elton va a vivir para siempre, todos pensamos eso. Él es tan vibrante que es algo fácil de creer, pero su situación te obliga a enfrentar otra realidad”.
Elton John, tras más de 40 discos, una carrera de éxito desde los años setenta basada en la excentricidad y canciones interpretadas al piano, realizó su gira de despedida, Farewell Yellow Brick Road, entre 2018 y 2023, porque quería centrarse en su familia y en cuidar su salud. La última actuación del cantante fue durante el festival de música de Glastonbury (Reino Unido) el pasado 26 de junio. Además de sus problemas de visión, se ha enfrentado otros problemas de salud como un reemplazo de ambas rodillas y de la cadera derecha tras una caída (lo que le obligó a retrasar su gira de despedida en 2021), una diabetes tipo 2 a principios de los 2000 y un cáncer de próstata en 2017.
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