El PSOE quiso suspender la votación agónica del pacto fiscal en contra del Reglamento

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La agonía que vivió el Gobierno la noche del lunes al martes de la semana pasada para sacar adelante el pacto fiscal llegó a tal extremo que pasada la medianoche el presidente de la Comisión de Hacienda, el socialista Alejandro Soler, propuso a los letrados del Congreso suspender la votación del informe de la ponencia y celebrarla en otro momento ante el convencimiento de que podrían perderla , según ha podido confirmar ABC. El PSOE no ha querido pronunciarse al respecto. Esa mañana, antes de que comenzara la votación, el Gobierno había asegurado que no había posibilidad alguna de aplazarla, fuera cual fuera el resultado, ya que el debate se había retrasado dos veces durante la semana anterior. Pero el vértigo a perder fue creciendo según pasaban las horas, al comprobar que los socios no se arrugaban y mantenían firmes sus posturas enfrentadas. ERC, Bildu y BNG reclamaban el mantenimiento del impuesto a las energéticas, y Junts no aceptaba prorrogarlo. Esta situación llevó a los socialistas a contemplar todas las posibilidades a la desesperada, incluso la suspensión de la votación, pese a que el Reglamento del Congreso no lo permite. El intento de Soler chocó con los letrados de la Cámara Baja, que se negaron a avalar la maniobra advirtiendo que constituiría «nulidad de actuaciones». Es decir, que la votación sería nula cuando se produjera al haber saltado de una sesión a otra. «Es una regla fundamental del debate que las sesiones del Pleno o de la Comisión deben celebrarse hasta agotar el orden del día acordado, salvo modificación del mismo por la propia Comisión. La sesión debe continuar hasta agotar el orden del día siempre. Esta regla responde a un principio de continuidad y efectividad en el funcionamiento de las Cámaras, con un fuerte predominio de la unidad de acto, para evitar precisamente una actividad esporádica e interrumpible», subrayan a este periódico desde el cuerpo de letrados. «Las suspensiones en ningún caso pueden suponer una nueva sesión», remachan.Noticia Relacionada estandar Si Expertos ven posible malversación por inducción de Begoña Gómez con la asesora de La Moncloa Carmen Lucas-Torres Penalistas recuerdan que los 'extraños' pueden intervenir en los delitos especiales si hay «dominio funcional»Antes de que Soler se decidiera a plantear esta maniobra, la portavoz de ERC en la Comisión, Pilar Vallugera , ya había preguntado a los letrados por la posibilidad de la suspensión y los juristas ya le advirtieron que era completamente contrario al Reglamento levantar la sesión o aplazarla a otro día. Al borde de las dos horasEl 'no' rotundo de los letrados disuadió a los socialistas, que se entregaron a garantizar a Junts que su acuerdo para retirar el impuesto a las energéticas se mantenía vigente pese a que, una hora antes, habían alcanzado un acuerdo con ERC, Bildu y BNG para prorrogarlo por un año. La suspensión de la votación fue puesta sobre la mesa por el presidente de la Comisión de Hacienda en torno a las 00:20 horas del martes , cuando el anómalo receso que el propio Soler había decretado a las 20:40 horas del lunes se acercaba ya a las dos horas de duración. Ese receso ya era irregular porque se produjo durante la votación, cuando se habían votado las enmiendas y el informe de ponencia era lo único que faltaba por votar. El Reglamento del Congreso prohíbe expresamente que las votaciones se interrumpan «por causa alguna» . «Durante el desarrollo de la votación, la presidencia no concederá el uso de la palabra y ningún diputado podrá entrar en el salón ni abandonarlo», dice el artículo 80. Por ello, el presidente de la Comisión había decretado «un receso de unos minutos». Junts callaAproximadamente unos quince minutos después de que los letrados del Congreso advirtieran a Soler de que no procedía suspender la votación, el presidente de la Comisión reanudó la sesión. Fue entonces cuando Vallugera pidió la palabra para explicar que habían llegado a un acuerdo con el Gobierno y votarían a favor a cambio de un decreto que prorrogaría el gravamen a las empresas energéticas. El portavoz de Junts, Josep Cruset, no pidió la palabra pero fuera de micrófono avisó, al igual que la portavoz del PNV, Idoia Sagastizabal, que su grupo no votaría a favor de ese decreto. Hacienda salvó la situación asegurando que todos los pactos eran compatibles cerrando así una noche de infarto en la que se bordeó la normativa.

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