El fútbol moderno , cada día más homogéneo y a la vez cosmopolita, se aleja temporada tras temporada de los viejos usos y costumbres que lo acompañaron desde su nacimiento en la segunda mitad del siglo XIX. Las identidades locales o nacionales, los códigos de vestuario o las tradiciones de las plantillas han cambiado sensiblemente desde entonces, con grupos de futbolistas en la actualidad más pendientes de los enormes cuerpos técnicos que les machacan con instrucciones hasta minutos antes del pitido inicial o, si estos se lo permiten, de los omnipresentes móviles y las redes sociales. Además del fútbol más modesto, que consigue resistir en cierta medida a las moderneces al estilo de la irreductible aldea gala de Astérix y Obélix frente al acoso de las cohortes romanas, aún quedan vestuarios rebeldes en la élite, en los que algunas tradiciones aguantan firmes .Es el caso del Athletic Club de Bilbao , según demostraron las cámaras de televisión este domingo en la previa de su choque en San Mamés ante el Villarreal. En el fugaz paso que el operador que retransmitía el partido hizo por los vestidores local y visitante se pudo ver una llamativa imagen. La de una pared forrada casi al completo por estampitas de vírgenes y santos . El curioso rincón del vestuario de los 'leones' en su estadio ocupa una esquina junto al banco donde se pertrecha habitualmente antes de salir al césped Iñaki Williams, el nueve rojiblanco. Las imágenes mostraron al mayor de los Williams colocándose la botas con un sinfín de postales religiosas pegadas detrás. El vídeo, corto pero llamativo, atrajo la atención de muchos aficionados, sorprendidos de que en los tiempos que corren el sentimiento religioso esté tan presente en un vestuario de un equipo de Primera División en forma de imágenes de vírgenes y santos. El 'Padrenuestro', una tradiciónEn realidad esto fue lo sorprendente, pues en otras conexiones con la caseta del Athletic o de otros equipos las cámaras han cazado a los grupos rezando juntos antes o después de lanzar otros mensajes o arengas y en los momentos previos a la salida al terreno de juego. Íker Muniaín, capitán del Athletic Club hasta la pasada temporada, reveló en su libro 'Un balón, un escudo, una vida' que esta « es una tradición de carga simbólica que se ha ido trasmitiendo y perpetuando generación tras generación , aunque hoy somos pocos los creyentes en el vestuario. Antes la gente era más religiosa de lo que lo son los chavales hoy en día».Noticia Relacionada Fútbol estandar Si El rebote de Flick por el penalti a 'Tigrinho' provoca su primera roja Miguel ZarzaYa sea por tradición o por superstición, el caso es que este domingo tuvo un desenlace positivo, pues el Athletic Club se impuso con solvencia a un equipo tan correoso como el Villarreal , manteniéndose en los primeros puestos de la clasificación de Primera División.
Cargando…
www.abc.es