El Gobierno frena 13 de sus 19 leyes urgentes para evitar más derrotas

[Jovani_Hoppe]

Durante las negociaciones previas a la investidura de Pedro Sánchez, altos cargos del Ejecutivo anticipaban que «si hay que gobernar con menos leyes, se gobernará con menos leyes». Veían entonces la reducción de la actividad legislativa como la solución para el sudoku que supone unir en el mismo bloque a partidos rivales en lo territorial y lo ideológico. Pero trece meses después, el Gobierno se ve cada vez más castigado por la inexistencia de un mínimo común múltiplo, esto es, unos puntos comunes que unan a todo el bloque en torno a un programa de legislatura. Carecer de los votos suficientes para asegurar el resultado final de cualquier iniciativa está llevando al Gobierno a frenar la tramitación de leyes propias y urgentes. De los 19 proyectos que el Ejecutivo pretendía tramitar por la vía rápida, 13 están siendo detenidos con prórrogas del plazo de enmiendas y seguirán en esta situación al menos hasta el 4 de febrero. Diez de ellos llevan ya entre cuatro y diez meses en esta situación, sin cambiar de estado ni siquiera para avanzar hacia la siguiente fase de la tramitación y en la que podrían volver a quedar embarrancados: las enmiendas al articulado. Además, otras dos leyes no urgentes del Gobierno se encuentran en el mismo punto , y ocho proposiciones presentadas por los socios de investidura están corriendo la misma suerte (dos de Sumar, dos de PNV, otras dos de ERC, una de Junts y otra de Podemos).Noticia Relacionada estandar Si El 2024 ha sido el año con menos leyes durante el sanchismo sin haber elecciones de por medio Juan Casillas Bayo El PP denuncia que en medio de esta parálisis, el Gobierno bloquea veinticuatro iniciativas suyasTodo ello en lo que se refiere a su factoría o la de sus afines, ya que al margen de estas cifras se encuentran 15 leyes del Senado que los partidos de la coalición mantienen bloqueadas: cuatro del PP; otras dos de parlamentos autonómicos ( Cataluña y Galicia) y una última procedente de una iniciativa ciudadana. En total, son 45 las leyes que se encuentran en este momento en el congelador en el Congreso.Los socialistas abusan de que el Reglamento de esta Cámara prevé quince días para la presentación de enmiendas y su posible prórroga, pero sin un máximo de tiempo. «Se redactó basándose en un principio de confianza y lealtad, para que los trabajos parlamentarios puedan desarrollarse con normalidad, calidad y sosiego, no para que las prórrogas se usen de forma perversa para bloquear iniciativas o salvavidas ante la propia debilidad política», explican fuentes parlamentarias. Se trata, por tanto, de un vacío legal que los socialistas ya explotaron en la legislatura pasada usando la pandemia como coartada, pero que están normalizando en esta legislatura. Para prorrogar sistemáticamente los plazos, utilizan a la Mesa del Congreso que preside Francina Armengol y que el PSOE controla junto a Sumar.Más de diez meses de esperaLos casos más sangrantes de leyes propias varadas son el proyecto de ley de familias y el que pretende regular los servicios de atención a la clientela. Ambos supuestamente urgentes pero parados desde el pasado mes de marzo y sumando 32 ampliaciones del plazo de enmiendas cada uno. El primero procede de la legislatura pasada y pretende clasificar las diferentes situaciones familiares, elevar la protección social y la conciliación de la vida laboral y personal.El segundo aspira a mejorar los derechos de los consumidores frente a las empresas de suministros como agua, gas, electricidad, transporte, servicios postales, medios audiovisuales o comunicaciones electrónicas para ver las quejas y reclamaciones ágilmente. Pero el Gobierno no tiene mayoría para asegurarse la redacción final de ninguno de los dos ni certezas de que el PNV y Junts no vayan a pactar enmiendas con el PP.La danaSiendo urgentes, desde primeros de junio duermen también el sueño de los justos el proyecto de ley de universalidad del Sistema Nacional de Salud, con 20 ampliaciones de enmiendas. Se trata, además, de una bandera de los socialistas, ya que este texto pretende eliminar los límites de acceso a la asistencia sanitaria que introdujo el Gobierno de Mariano Rajoy e impedir la introducción de nuevos copagos. En la misma situación se encuentra la reforma sobre la responsabilidad civil en la circulación de vehículos a motor, que también pretende cambiar la ordenación, supervisión y solvencia de las aseguradoras. Desde septiembre tampoco hay avances en los proyectos del Gobierno para suspender los lanzamientos sobre la vivienda habitual; el del cine y la cultura audiovisual; el desarrollo de las medidas urgentes para simplificar y mejorar la protección por desempleo; la ley de promoción del uso del transporte público colectivo terrestre por parte de los jóvenes; la reforma para consolidar la equidad y cohesión del Sistema Nacional de Salud; la ley de la Función Pública del Estado; y la ley de prórroga de las medias por los conflictos de Ucrania y Oriente Medio. Todos ellos también urgentes, como lo son la reforma de la ley de información empresarial sobre sostenibilidad, la ley de respuesta a la dana , y la reforma del régimen jurídico de RTVE, que ven ampliarse sus plazos semana a semana desde noviembre.Injurias a la CoronaAdemás, hay dos proyectos del Gobierno que llevan más de dos meses tramitándose en el Congreso sin registrar avances. Son el restablecimiento de la Comisión Nacional de Energía y la ley de impulso a la economía social. En ambos casos la tramitación es ordinaria y tanto su plazo como su situación no es tan extraordinaria. En lo que tiene que ver con las leyes de socios de investidura que la coalición está obstaculizando, el mayor bloqueo lo está sufriendo ERC con su proposición para garantizar el derecho a la autonomía de la voluntad de los deportistas. Esto es, para que no sea obligatorio para estos acudir a convocatorias de las selecciones nacionales. Este texto lleva paralizado desde el pasado mes de febrero, con 36 ampliaciones del plazo de enmiendas, porque al igual que sucede con el resto de textos del bloque en la misma situación, los socialistas admiten su tramitación como gesto de buena voluntad hacia sus aliados pero sin estar de acuerdo con su contenido y no teniendo voluntad de aprobarlos.ERC, PNV y Sumar, peorEl mismo tiempo lleva bloqueada la reforma del Código Penal propuesta por Sumar para despenalizar las injurias a la Corona o el enaltecimiento del terrorismo. En este caso, los dos socios de Gobierno no se ponen de acuerdo en la redacción final y están ampliando el plazo de enmiendas hasta llegar a un acuerdo. Los socialistas quieren introducir cambios que rebajen el texto y la coalición que encabeza Yolanda Díaz cree que eso lo desnaturalizaría. Lo mismo sucede con la reforma del Poder Judicial que propone Sumar para la protección de los derechos humanos y la jurisdicción universal en España. ERC también asiste al bloqueo de otra de sus propuestas de ley, la reforma del funcionamiento de la cadena alimentaria. En este caso, desde antes del verano y sumando ya 19 ampliaciones del plazo de enmiendas. Tras este partido y Sumar, el que más sufre las trampas de los socialistas es el PNV. En concreto, por su proposición de ley para reformar los secretos oficiales, que lleva varias legislaturas poniéndose en marcha pero nunca se concluye. Esta vez se encuentra varada desde marzo y acumula 31 ampliaciones del plazo de enmiendas sin horizonte de cambio. Desde finales de octubre tampoco registra avances la ley para reformar el Centro Nacional de Inteligencia, también del Grupo Vasco. En este caso la ampliación del plazo de enmiendas se queda en ocho pero fuentes socialistas señalan que no hay intención de desbloquearla de momento.Degradación parlamentariaMás reciente, de octubre, es el inicio del trámite de enmiendas en la proposición de Podemos que entronca con la ley del 'solo sí es sí'. No registra cambios desde entonces y pretende impulsar una «aplicación homogénea» de esa regulación y reconocer la asistencia jurídica gratuita de las víctimas de violencia sexual. En el mismo mes arrancó la fase de enmiendas de la ley que propone Junts para reformar el Código Penal y la Ley de Enjuiciamiento Criminal en materia de multirreincidencia, aunque en este caso cuenta con más suerte ya que los socialistas acaban de pasarle al trámite de enmiendas al articulado. Más allá de la extrema debilidad política que denota el bloqueo de leyes a través de los plazos de enmiendas, el abuso de esta artimaña desnaturaliza un mecanismo diseñado para racionalizar el trabajo de la Cámara y, por tanto, aumenta la degradación de la vida parlamentaria.

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