El cómic es el único sector literario que no creció en ventas en España en 2023, con una facturación de 66,87 millones de euros, un 3,1% menos que en 2022. Los tebeos apenas representan el 2,3% de los ingresos del mercado de libros, que el año pasado fue liderado por la no ficción, con el 29,7% de las ventas, seguida por los textos educativos no universitarios (27,9%), la ficción (21,8%) y juvenil e infantil (17,4%). Así lo señala el informe anual de la Federación de Gremios de Editores de España, presentado este miércoles, en el que se resalta el crecimiento ininterrumpido del comercio de libros desde la pandemia.
“Más que bajada, diría que no ha habido un crecimiento significativo”, justificó sobre el número de cómics comercializados Óscar Chicharro, de la consultora Conecta, que realizó el estudio. Los datos de 2023 cortan la subida consecutiva que venían registrando los tebeos desde 2020: un incremento interanual del 3% en 2021 y del 2% en 2022. El presidente de la Federación, Daniel Fernández, hipotetizó que la razón de la caída puede haber sido el pinchazo de la burbuja del manga, que en 2022 suponía la mitad de las historietas que se vendían en España. Las cifras se solapan con las presentadas en enero por la Asociación Sectorial del Cómic de España, en las que ya indicaban que el 51% de los autores de cómics españoles ingresa menos de 20.000 euros al año.
Es cierto también que los tebeos son el género que menos títulos en papel lanzó el pasado año: 1.926. En el otro extremo están los títulos de no ficción (donde se incluyen textos científicos, de divulgación general, diccionarios y enciclopedias) con casi 24.000 obras publicadas. Fernández contrapuso el dato con la facturación registrada en cómics digitales, un 5,7% más que en 2022. “Antes, comprar cómics virtuales era algo impensable”.
Por el contrario, la compra de literatura infantil y juvenil es la que más crece, con una subida del 5,9% con respecto a 2022. Un ascenso por encima de los otros segmentos que también se replica en el balance de los últimos cuatro años: ha incrementado su facturación un 36% desde 2020, por encima de la ficción (23%), no ficción (19%) y textos no universitarios (4%).
En cuanto a formatos, los audiolibros facturaron el pasado año 6,70 millones de euros, un crecimiento nada menos que del 95% en relación con 2022. Mientras tanto, los ingresos por libros digitales son los que menos han subido (144 millones, un 3,4 % más que en el último informe) y el papel sigue dominando las ventas con una recaudación de 2.700 millones, un incremento interanual del 5,1%.
Las librerías es el principal canal de comercialización de obras físicas; el 37,8% de las ventas se realizan por esa vía, seguidas por un 20,3% de las cadenas (FNAC, Casa del Libro, El Corte Inglés...) y de lejos por los hipermercados (8,6%). En lo referente a títulos publicados en idiomas, el gallego y el euskera están a la cola (2,5% del total cada uno), detrás de otros (5,6%), el catalán (13,9 %) y el castellano (76%). “El libro no está agonizando, como pensábamos a principios de los 2000; el libro español sigue funcionando. Es cierto que surgen algunas dificultades en escenarios como Galicia, donde crece, pero no con la misma vitalidad en cuanto a ejemplares editados”, subrayó Fernández.
La pandemia del coronavirus ha impulsado de manera significativa la compra y consumo de libros en España. El promedio de ingresos del sector editorial ha pasado de 40,69 millones de euros al año entre 2014 y 2019, a una media de 139,01 millones al año en el periodo 2020-2023. El pasado año ha habido un crecimiento del 5,1%. “Es un poco cínico pensar que la mejor forma de llegar a los estándares europeos de lectura haya sido la pandemia y encerrar a los españoles, pero está sucediendo y el crecimiento es continuo”, sostuvo Fernández.
Si bien el incremento viene ocurriendo desde hace 10 años, los saltos más significativos se han dado desde 2020. Fernández aclaró que “no todo son buenas noticias” y señaló que casi un tercio de la población española no compra libros como ocio: “Esa estadística nos dice que son los mismos que nunca pisan un museo, no entran a una biblioteca y difícilmente acuden a espectáculos escénicos. Del otro lado, hay un tercio de españoles que está por encima de la media europea y compra un mínimo de 10 libros al año, y en el último tercio están los que adquieren unos cinco por año”.
Desde 2019, México es el país al que más se exportan libros desde España. Un título que históricamente le perteneció a Francia, que queda en segundo lugar, y Argentina ocupa el tercero.
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“Más que bajada, diría que no ha habido un crecimiento significativo”, justificó sobre el número de cómics comercializados Óscar Chicharro, de la consultora Conecta, que realizó el estudio. Los datos de 2023 cortan la subida consecutiva que venían registrando los tebeos desde 2020: un incremento interanual del 3% en 2021 y del 2% en 2022. El presidente de la Federación, Daniel Fernández, hipotetizó que la razón de la caída puede haber sido el pinchazo de la burbuja del manga, que en 2022 suponía la mitad de las historietas que se vendían en España. Las cifras se solapan con las presentadas en enero por la Asociación Sectorial del Cómic de España, en las que ya indicaban que el 51% de los autores de cómics españoles ingresa menos de 20.000 euros al año.
Es cierto también que los tebeos son el género que menos títulos en papel lanzó el pasado año: 1.926. En el otro extremo están los títulos de no ficción (donde se incluyen textos científicos, de divulgación general, diccionarios y enciclopedias) con casi 24.000 obras publicadas. Fernández contrapuso el dato con la facturación registrada en cómics digitales, un 5,7% más que en 2022. “Antes, comprar cómics virtuales era algo impensable”.
Por el contrario, la compra de literatura infantil y juvenil es la que más crece, con una subida del 5,9% con respecto a 2022. Un ascenso por encima de los otros segmentos que también se replica en el balance de los últimos cuatro años: ha incrementado su facturación un 36% desde 2020, por encima de la ficción (23%), no ficción (19%) y textos no universitarios (4%).
Las compras de audiolibro crecen un 95%
En cuanto a formatos, los audiolibros facturaron el pasado año 6,70 millones de euros, un crecimiento nada menos que del 95% en relación con 2022. Mientras tanto, los ingresos por libros digitales son los que menos han subido (144 millones, un 3,4 % más que en el último informe) y el papel sigue dominando las ventas con una recaudación de 2.700 millones, un incremento interanual del 5,1%.
Las librerías es el principal canal de comercialización de obras físicas; el 37,8% de las ventas se realizan por esa vía, seguidas por un 20,3% de las cadenas (FNAC, Casa del Libro, El Corte Inglés...) y de lejos por los hipermercados (8,6%). En lo referente a títulos publicados en idiomas, el gallego y el euskera están a la cola (2,5% del total cada uno), detrás de otros (5,6%), el catalán (13,9 %) y el castellano (76%). “El libro no está agonizando, como pensábamos a principios de los 2000; el libro español sigue funcionando. Es cierto que surgen algunas dificultades en escenarios como Galicia, donde crece, pero no con la misma vitalidad en cuanto a ejemplares editados”, subrayó Fernández.
La pandemia del coronavirus ha impulsado de manera significativa la compra y consumo de libros en España. El promedio de ingresos del sector editorial ha pasado de 40,69 millones de euros al año entre 2014 y 2019, a una media de 139,01 millones al año en el periodo 2020-2023. El pasado año ha habido un crecimiento del 5,1%. “Es un poco cínico pensar que la mejor forma de llegar a los estándares europeos de lectura haya sido la pandemia y encerrar a los españoles, pero está sucediendo y el crecimiento es continuo”, sostuvo Fernández.
Si bien el incremento viene ocurriendo desde hace 10 años, los saltos más significativos se han dado desde 2020. Fernández aclaró que “no todo son buenas noticias” y señaló que casi un tercio de la población española no compra libros como ocio: “Esa estadística nos dice que son los mismos que nunca pisan un museo, no entran a una biblioteca y difícilmente acuden a espectáculos escénicos. Del otro lado, hay un tercio de españoles que está por encima de la media europea y compra un mínimo de 10 libros al año, y en el último tercio están los que adquieren unos cinco por año”.
Desde 2019, México es el país al que más se exportan libros desde España. Un título que históricamente le perteneció a Francia, que queda en segundo lugar, y Argentina ocupa el tercero.
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El cómic es el único sector literario que no creció en ventas en 2023
El gremio editorial señala en su informe anual que la facturación por libros se ha triplicado desde la pandemia
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