El Atlético evita el ridículo sobre la bocina

[Buddy_Kunde]

Los fantasmas de Albacete, Cultural Leonesa, y Cornellá asomaron por la cabeza de la afición del Atlético de Madrid durante gran parte del encuentro ante el Cacereño, pero los de Simeone, a pesar de su tétrica actuación, reaccionaron a tiempo y evitaron el ridículo. Merencio adelantó a los extremeños, Lenglet empató la contienda a siete del final, De Paul completó la remontada en el descuento y Julián Álvarez hizo el tercero con el tiempo casi cumplido.Noticias relacionadas opinion Si El contragolpe Licencia para soñar Nicolás Álvarez Tólcheff estandar No Fútbol Problemas a la vista con la nueva fecha del Valencia-Real Madrid Pablo LodeiroToda la clarividencia ofensiva que habían demostrado los rojiblancos en las últimas fechas se quedó en Pucela. Con el conjunto extremeño replegado, el Atlético asumió el papel de dominador desde el inicio, pero la espesura inundaba sus posesiones. Koke y De Paul incapaces de generar, Lino y Riquelme inofensivos, Correa bien vigilado entre líneas y la superioridad física de Sorloth anulada.Un tiro desviado de De Paul y un flojo remate de Sorloth eran lo poco que llevarse a la boca hasta que, a la media hora de encuentro, consiguió el combinado colchonero coger descolocada a la zaga del Cacereño. Correa filtró un gran balón para que Lino se midiera a Diego Nieves, pero el meta sacó una buena pierna para repeler el disparo del brasileño.Casi en la siguiente jugada, una mala presión de los de Simeone sumada a la nula contundencia de Le Normand dejó un latifundio a la espalda de la defensa rojiblanca para Christian Martínez. El ariete encontró liberado en el segundo palo a Merencio, Witsel falló en su intento de despeje y el extremo contactó un preciso remate para adelantar a los suyos. Se creció el conjunto extremeño y desde el gol fue capaz de prolongar sus posesiones y alejar a un tambaleante Atlético de su portería. Gozó Riquelme de una inmejorable ocasión antes del descanso, pero de nuevo apareció el pie de Diego Nieves para evitar el empate. Debía cambiar mucho el plan y Simeone introdujo tras el paso por vestuarios a Llorente y Julián Álvarez, además de Lenglet por un Le Normand que, a pesar de la buena noticia que suponía su regreso 67 días después ataviado con un casco al estilo Petr Cech, demostró estar muy lejos de su nivel.Salió el Atlético con otro aire, otro empuje, pero a su mayor intensidad ofensiva se le sumó la amenaza de los contraataques del Cacereño, lo que dio paso a un intercambio de golpes. Pudieron De Paul y Correa atestar el primero de la segunda mitad con sendas oportunidades, pero sus claros disparos se marcharon desviados.Se fue desinflando el ímpetu de los madrileños y la entrada de Barrios y Gallagher poco o nada ayudó a mantenerlo. Volvió a intentarlo De Paul desde la frontal con un colocado remate en busca de la escuadra, aunque Diego Nieves, empeñado en erigirse como héroe, dejó una genial estirada para arruinar el golazo del argentino.Se agotaba el tiempo, crecían los nervios de la parroquia rojiblanca a pasos agigantados, hasta que aparecieron Lenglet y De Paul para apaciguar las aguas. Un cabezazo del francés, asistido por el argentino, logró la igualada a falta de siete minutos. Y en el descuento, con Simeone expulsado, un afortunado disparo lejano de De Paul se introdujo en la portería tras rebotar en la zaga del Cacereño. Julián Álvarez, con el tiempo casi cumplido, sentenció el encuentro.

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