Los sindicatos mantienen la presión contra el Gobierno a cuenta de la crisis de Muface. El sindicato CSIF -uno de los mayoritarios entre los funcionarios- ha registrado en el Congreso de los Diputados "centenares de quejas de los mutualistas por los retrasos, anulaciones y suspensiones de citas". Como ya hiciera el pasado lunes en el Defensor del Pueblo, han expuesto esta denuncia en la Cámara Baja para solicitar a los grupos parlamentarios que "presenten iniciativas para garantizar que los empleados públicos reciben una asistencia sanitaria de calidad".
"En el escrito adjuntamos las quejas de los mutualistas de toda España que nos están llegando para que los partidos políticos tomen nota", ha comentado el secretario de acción sindical de CSIF, Francisco Lamas, a las puertas de la institución. En este sentido, Lamas ha remarcado que los funcionarios no "están dispuestos a renunciar a Muface" y que no van a parar hasta "dar respuesta a un conflicto que se podía haber evitado" tras remarcar que se ha llegado a una situación "preocupante e innecesaria". Desde CSIF han recordado que el próximo sábado 14 de diciembre han convocado una "gran movilización" delante de la Dirección General de Muface en Madrid para la defensa del concierto sanitario.
Protestas en la dirección general de Muface y Unespa
La protesta tendrá lugar días después de la convocada por CCOO, UGT, ANPE, Adide, USIE, UFP, SUP, Acaip y SIAT, que se celebra este miércoles a las puertas de Unespa -la patronal de las aseguradoras- por la mañana, mientras que por la tarde han convocado a los manifestantes en Muface, así como en las respectivas sedes provinciales. Los representantes de los trabajadores reclaman una "solución definitiva que dé tranquilidad y calma a los empleados públicos, y que asegure su asistencia sanitaria", según indican en el comunicado.
En las concentraciones de esta mañana se ha exigido al Gobierno y a la propia mutualidad una "mayor transparencia" en la negociación del nuevo concierto y, además, solicitan que se les incluya en el proceso de elaboración de la nueva licitación "para velar por la seguridad de la atención sanitaria de los mutualistas". El ministro para la Transformación Digital y Función Pública, Óscar López, aseguró ayer que se lanzaría antes de acabar el 2024, oferta que deberá ser superior a la del 17,12% planteada en un primer momento y que las aseguradoras rechazaron debido a la "deficitaria situación" que atraviesan las mutuas.
Precisamente, este martes se hizo pública la consulta preliminar de mercado lanzada a las aseguradoras que actualmente prestan el servicio -SegurCaixa Adeslas, Asisa y DKV Seguros- para que indicasen el precio al que estarían dispuestas a renovar. Si bien la primera ha participado con el envío de la documentación a través de una carta, no lo ha hecho por los cauces establecidos para tal fin, como si han hecho las otras dos. A este respecto, exponen que una de las dos compañías -sin especificar cuál- ha calculado una prima variable a tenor de la edad configurada por Muface, mientras el otro operador "ha recurrido al tradicional incremento lineal".
No obstante, Función Pública echa en falta la justificación de los costes. "La respuesta de los operadores no aporta la evidencia de costes que conforma el total de la prima", indican en alusión a la tabla de desglose de costes que se solicitaba para justificar el importe de la prima solicitada. En opinión del departamento pilotado por Óscar López, "habría sido deseable" obtener más información de los costes que justifican el incremento de la prima por parte de los operadores, si bien analizando las informaciones se deduce que la mayor parte del gasto es coste directo, donde se incluye la prestación asistencial propiamente dicha. El concierto en curso expira de manera oficial el próximo 31 de diciembre, pero en caso de no continuar las aseguradoras deberán garantizar la asistencia hasta el 31 de enero, con posibilidad de prórroga en algunos supuestos como los embarazos.
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