Comienza San Fermín, una sobrevalorada Feria del Toro

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27 Sep 2024
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Morante de la Puebla continúa de baja médica y no estará el viernes 12 de julio en la Feria de San Fermín. Esa es la preocupante noticia que se conoció la tarde del miércoles, y que ha obligado a la Casa de Misericordia a contratar a otro torero de su corte; en este caso, a Pablo Aguado. La ausencia de Morante significa que aún no se siente recuperado de sus problemas síquicos, y pone en peligro otros carteles próximos en los que está anunciado. Su retirada no afectará, no obstante, a la feria de Pamplona, cuyo éxito de público responde fundamentalmente a la fuerza de la fiesta de los Sanfermines y no a nombres concretos.

A las ocho de esta tarde se iniciará el primer paseíllo de la Feria de Toro de 2024 de Pamplona en el que participan tres novilleros de alto interés tras su más que prometedor paso por la pasada Feria de San Isidro: Jarocho, el único torero que cortó las dos orejas en un toro, y Alejandro Chicharro y Samuel Navalón, que dieron una bien merecida vuelta al ruedo cada uno.

A las 12 horas de mañana, sábado, se lanzará el chupinazo, quedarán inaugurados los Sanfermines, y la plaza ofrecerá un espectáculo de rejoneo en el que se despedirá de sus paisanos el caballero Pablo Hermoso de Mendoza, querido y respetado en esta plaza.

El domingo, a las ocho de la mañana, un cohete anunciará el inicio del primer encierro, las calles del recorrido estarán abarrotadas de corredores (atrevidos mozos y mozas) y espectadores desde las barreras del vallado y en los balcones, y esa será la puesta de largo del toro, el gran protagonista de una fiesta que ha traspasado fronteras. Ocho encierros multitudinarios —EL PAÍS comenzará su transmisión diaria a las 7.45 horas— y ocho corridas de toros que se pueden ver a través de la plataforma televisiva privada Onetoro, completan la famosa Feria del Toro que mantiene su popularidad y prestigio a pesar de que la tozuda realidad ponga en serias dudas la relevancia taurina de este ciclo.

El alcalde y la mayoría de los concejales que presiden las corridas de Pamplona pertenecen a partidos que rechazan los toros

El hecho de que la presidencia de las corridas corresponda al alcalde de la ciudad, según dictamina el Reglamento Taurino de la Comunidad Navarra, lo que le permite subir al palco el día de San Fermín, enfundado, en el caso de los señores, en un chaqué y tocado con un sombrero de copa, suena a chiste, aunque no lo sea; pero no acaba ahí, porque el regidor reparte el resto de los días entre los concejales de los distintos partidos, lo que les permite lucir sus mejores galas —el chaqué, se supone que alquilado, que no falte— y ser el centro de atención de miles de personas.

Pero el chiste es muy malo, además de incoherente, porque resulta que la mayoría de quienes presiden en Pamplona pertenece a partidos que rechazan la fiesta de los toros.

Por ejemplo, el alcalde actual, Joseba Asirón, de EH Bildu, presidirá la corrida del día de San Fermín, aunque él y su partido son antitaurinos confesos, y su grupo municipal, más consecuente, ha renunciado a participar en ese derroche de frivolidad. Pero no han declinado la invitación dos concejales de Geroa Bai y otros dos del Partido Socialista Navarro, formaciones que no muestran apego alguno por la tauromaquia, ni dos de Unión del Pueblo Navarro y uno del Partido Popular, formaciones que, al menos, no están en contra.

Pero hay más: a ninguno de ellos se les supone conocimiento suficiente para presidir una corrida de toros en una plaza de primera categoría. Cuentan con la ayuda de un asesor y un profesional veterinario, pero los años pasados demuestran que la presidencia está más pendiente de lo que dictan los tendidos de sol que de los consejos de los expertos.

Raúl Armendáriz, concejal de UPN, en el centro, presidente de la corrida celebrada el 13 de julio de 2023.

En fin, que los partidos representados en la capital navarra aprovechan los toros para recordar a los suyos que existen y dejarse ver en multitud, que siempre debe ser agradable para quienes viven de los votos.

Pero he aquí una prueba fehaciente de lo poco que la fiesta de los toros importa a quienes dirigen la Comunidad Navarra.

Como es conocido, la Casa de Misericordia, la entidad que gestiona una residencia para 537 personas mayores, es la propietaria de la plaza y responsable de todo lo relacionado con los toros, desde Los Corrales del Gas, a los encierros, la elaboración de los carteles y la gestión de las corridas. Una comisión taurina elige los toros y los toreros, y si bien hay que aplaudirle que premie a toreros que han triunfado en San Isidro, aunque aún no sean figuras, hay que reprocharle su conservadurismo ganadero.

Vuelve dos tardes Roca Rey, el gran triunfador de San Fermín de 2023, acompañado por las figuras más sobresalientes de la actualidad, incluido Juan Ortega, que pisará la arena por primera vez, y también tienen hueco toreros nuevos como Fernando Adrián, Juan de Castilla y Gómez del Pilar, y otros que ya han debutado en esta plaza, pero igualmente interesantes, como Borja Jiménez, Román, Isaac Fonseca, Manuel Escribano y Jesús Enrique Colombo.

La Casa de Misericordia es innovadora en la contratación de toreros emergentes y muy conservadora en el apartado ganadero

Lo que carece de una explicación lógica es el empecinamiento de la comisión en repetir, año tras año, los hierros ganaderos al margen del éxito o el fracaso alcanzado por los toros.

En 2024, solo hay una novedad, la ganadería salmantina de Domingo Hernández, y vuelven todas las demás. Pero si se tiene en cuenta el juego de los toros en la feria pasada, solo Jandilla y Victoriano del Río lidiaron tres toros destacados cada una; las demás, incluida la de Núñez del Cuvillo, que descansa, se apuntaron un sonoro fracaso.

Y ya se sabe que el asunto de los trofeos es altamente preocupante. En reiteradas ocasiones se ha escrito que Pamplona es una tómbola. Deciden los tendidos de sol, a los que poco importa el juego del toro y la labor del torero.

Por todo ello, quizá se pueda afirmar sin temor a equívoco que la Feria del Toro, con sus llenos diarios, está sobrevalorada.

Los carteles de la Feria del Toro son los siguientes:

Viernes, 5 de julio. Novillada. Jarocho, Alejandro Chicharro y Samuel Navalón (novillos de Pincha).

Sábado, 6. Espectáculo de rejoneo. Pablo Hermoso de Mendoza, Roberto Armendáriz y Guillermo Hermoso de Mendoza (toros de El Capea).

Domingo, 7. Diego Urdiales, Fernando Adrián y Borja Jiménez (toros de La Palmosilla).

Lunes, 8. Juan Leal, Román e Isaac Fonseca (toros de Cebada Gago).

Martes, 9. Sebastián Castella, Emilio de Justo y Ginés Marín (toros de Victoriano del Río).

Miércoles, 10. Miguel Ángel Perera, Andrés Roca Rey y Tomás Rufo (toros de Fuente Ymbro).

Jueves, 11. Alejandro Talavante, Daniel Luque y Juan Ortega (toros de Domingo Hernández).

Viernes, 12. Cayetano Rivera, Roca Rey y Pablo Aguado, que sustituye a Morante (toros de Jandilla).

Sábado, 13. Rafaelillo, Gómez del Pilar y Juan de Castilla (toros de José Escolar).

Domingo, 14. Antonio Ferrera, Manuel Escribano y Jesús Enrique Colombo (toros de Miura).

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