glen.tromp
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Se estima que en España más del 15% de la población tiene problemas de fertilidad, tal y como apunta la Sociedad Española de Fertilidad. Esto significa que una de cada seis parejas no puede concebir un hijo de manera natural. Por ello, la Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoce este problema como una enfermedad que afecta tanto a hombres como a mujeres. En los últimos años, la media de nacimientos ha caído y los embarazos se dan a partir de los 35 años por distintos factores.
Por ejemplo, entre muchos de esos factores se incluye la alimentación. Así como hay alimentos que no favorecen a la salud del organismo y, por tanto, pueden alterar la fertilidad, hay otros tantos repletos de bioquímicos que pueden ayudar a conseguir el embarazo. Buen ejemplo de ello es el marisco, como las gambas, las almejas o mejillones, ya que, investigaciones de Harvard lo señalan como un auténtico afrodisíaco que no solo aumenta las relaciones sexuales, sino también la posibilidad de quedarse embarazada.
El efecto del marisco en la fertilidad
Investigadores del Departamento de Nutrición del Harvard T.H. Chan School of Public Health sometieron a estudio a más de 500 parejas que tenían el deseo de tener descendencia. En esta investigación el objetivo era ver el impacto que tenía el consumo de marisco en la fertilidad. Fue así cómo hallaron que aquellas que consumieron más este tipo de alimento aumentaron sus relaciones sexuales y con ellas lograron alcanzar en un 92% el embarazo.
La primera hipótesis que hallaron fue que, al crecer el número de relaciones sexuales, más facilidad y probabilidad de conseguir la gestación. Sin embargo, poco después descubrieron que no solo estaba relacionado con la actividad sexual de la pareja.
Así pues, se planteó como una de las causas la presencia de los bioquímicos de los que se compone el marisco y también el pescado. Estos alimentos aportan proteínas, grasas saludables como el Omega-3 y además, minerales como el yodo y el hierro. Todos estos son nutrientes esenciales que los expertos recomiendan para la fertilidad y gestación, ya que otros de sus componentes como el zinc actúan como un afrodisíaco.
Cuántas raciones y qué tipo de marisco comer
Durante el proyecto de investigación aquellas parejas con deseos de concebir mejoraron su fecundidad comiendo ocho raciones de marisco o pescado al mes. Cabe destacar que este tipo de alimentación lo llevaba tanto el hombre como la mujer. Ya que los estudios han avalado la mejora tanto de la ovulación como del semen.
En cuanto a los pescados, los expertos recomiendas así el tipo azul rico en Omega-3 como el salmón, la trucha, el atún o la caballa. Y, en mariscos, las ostras, las gambas, almejas, cigalas, cangrejos o mejillones se consideran buenos afrodisíacos. Ahora bien, su consumo debe ser controlado y con moderación.
Comer marisco y pescado con moderación
No siempre todo es oro que reluce, como dice el refrán. Y, es que, este tipo de pescado y mariscos siempre ha estado en tela de juicio por los metales pesado que aportan. El mercurio es uno de los que más preocupa en el consumo de los productos del mar, por lo que hay que tener en cuenta que la alimentación debe ser moderada. Por ello, la Agencia Americana de Alimentos y Medicamentos (US Food and Drug Administration) limitó a 3 raciones a la semana de este tipo de alimento.
Comparándolo así con el estudio anterior, en el que solo comieron ocho raciones al mes, se demuestra así que no hace falta un consumo excesivo para mejorar tanto la líbido en la actividad sexual como la fertilidad. Además, las últimas investigaciones también apoyan el consumo de pescado durante el embarazo, e incluso, el marisco bien cocido, ya que ayuda al desarrollo cerebral del feto, previene de partos prematuros y tiene efectos sobre el colesterol y la hipertensión durante el embarazo.
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