yundt.jeromy
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Astro Bot se ha coronado como mejor videojuego de 2024 en la ceremonia de los Game Awards celebrada esta madrugada en Los Ángeles. En la gala, uno de los eventos más importantes del año en lo que a ocio interactivo se refiere, el juego de Team Asobi dio la sorpresa al imponerse a superproducciones como Elden Ring: Shadow of the Erdtree, el chino Black Myth: Wukong, el inmenso Final Fantasy VII Rebirth, la joya independiente Balatro y el RPG Metaphor: ReFantazio.
Considerados los Oscars de los videojuegos, The Game Awards (una gala organizada y dirigida por Geoff Keighley) han ido ganando peso dentro de la industria y proyección social con el paso de los años, de modo que ser nombrado Game Of The Year (GOTY) es el sello por el que todo juego pelea. En un emotivo discurso de aceptación, el director de Astro Bot (que también se llevó el premio a mejor dirección), Nicolas Doucet, dijo que estaba agradecido por un premio que da un empujón definitivo a un juego modesto (comparado con otros nominados) y que seguramente gracias al galardón “se convertirá en el primer juego que jugarán muchos niños”. Doucet rindió homenaje a Nintendo, el rival de Sony, y su personaje, Mario, por inspirarlos a la hora de crear Astro Bot.
Otros de los ganadores fueron Metaphor: ReFantazio (Mejor dirección de arte, Mejor narrativa, Mejor juego RPG), Senua’s Saga: Hellblade II (Mejor diseño de audio), Final Fantasy VII Rebirth (Mejor banda sonora), Helldivers 2 (mejor juego en curso, Mejor multijugador), Balatro (mejor juego independiente, mejor debut, mejor juego para móviles), Tekken 8 (Mejor juego de peleas) o Black Myth: Wukong (Mejor juego de acción). La gala tuvo también su sabor español con el premio a mejor juego con impacto social para Neva, de los españoles Nómada Studio, un premio pensado “para juegos que invitan a la reflexión y a experiencias con un profundo significado o mensaje social”. Con todo, y sin duda, fue la noche de Astro Bot.
Porque que Astro Bot se corone como mejor juego del año es una sorpresa, pero no tanto por su calidad (es un juego extraordinario) sino por su género: hoy rara vez un juego de plataformas consigue la implantación entre público y crítica que ha obtenido la criatura de Sony. El pertenecer a Sony, por cierto, es algo que marca profundamente al juego, que cuenta la historia de una comunidad de robots cuya nave espacial es atacada y en la que el único individuo que queda en pie y sano (el Astro Bot que manejamos) debe rescatar a todos sus amigos por una decena de planetas, en los que deberá explorar, resolver puzles y combatir criaturas. El hecho de que los personajes remeden a los grandes personajes de Sony (Kratos, Alloy, Ellie, Jak…) y de que la propia nave sea una PlayStation ha suscitado algunas críticas, que señalan el excesivo corporativismo del juego. Con todo, que un juego tan pensado para el disfrute puro se corone como el mejor del año ha sido una alegría para la comunidad gamer.
Desde hace varios años, la gala hace de gran evento del mundo interactivo, sirve para anunciar los juegos que marcarán los próximos meses. Entre los tráilers que más expectación han causado está The Witcher IV, el esperadísimo juego de CD Projekt RED en el que por primera vez en la saga la protagonista será una mujer: Ciri, la compañera del protagonista en los anteriores juegos; y el nuevo juego de Naughty Dog (creadores de The Last of Us y Uncharted): un juego de ciencia ficción llamado Intergalactic: The Heretic Prophet. En la gala hubo incluso actuaciones musicales como la de Snoop Dogg y la promocional de lo nuevo de El juego del calamar.
De todos modos, el juego más esperado del año que viene tiene nombre y apellidos. De hecho, The Game Awards cuentan con un premio a Juego más esperado del año que viene que, en esta edición, ha recaído (como no podía ser de otra manera) en Grand Theft Auto VI. La secuela del producto cultural más exitoso de la historia (GTA V ha generado más de 8.600 millones de euros), y cuyo desarrollo ha costado casi 2.000 millones, caerá como un meteorito sobre la Tierra en otoño de 2025 para poner patas arriba una industria que el año pasado genero 180.000 millones de euros en todo el mundo. Bueno, no nos engañemos: GTA VI pondrá patas arriba al mundo entero.
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Considerados los Oscars de los videojuegos, The Game Awards (una gala organizada y dirigida por Geoff Keighley) han ido ganando peso dentro de la industria y proyección social con el paso de los años, de modo que ser nombrado Game Of The Year (GOTY) es el sello por el que todo juego pelea. En un emotivo discurso de aceptación, el director de Astro Bot (que también se llevó el premio a mejor dirección), Nicolas Doucet, dijo que estaba agradecido por un premio que da un empujón definitivo a un juego modesto (comparado con otros nominados) y que seguramente gracias al galardón “se convertirá en el primer juego que jugarán muchos niños”. Doucet rindió homenaje a Nintendo, el rival de Sony, y su personaje, Mario, por inspirarlos a la hora de crear Astro Bot.
Otros de los ganadores fueron Metaphor: ReFantazio (Mejor dirección de arte, Mejor narrativa, Mejor juego RPG), Senua’s Saga: Hellblade II (Mejor diseño de audio), Final Fantasy VII Rebirth (Mejor banda sonora), Helldivers 2 (mejor juego en curso, Mejor multijugador), Balatro (mejor juego independiente, mejor debut, mejor juego para móviles), Tekken 8 (Mejor juego de peleas) o Black Myth: Wukong (Mejor juego de acción). La gala tuvo también su sabor español con el premio a mejor juego con impacto social para Neva, de los españoles Nómada Studio, un premio pensado “para juegos que invitan a la reflexión y a experiencias con un profundo significado o mensaje social”. Con todo, y sin duda, fue la noche de Astro Bot.
Porque que Astro Bot se corone como mejor juego del año es una sorpresa, pero no tanto por su calidad (es un juego extraordinario) sino por su género: hoy rara vez un juego de plataformas consigue la implantación entre público y crítica que ha obtenido la criatura de Sony. El pertenecer a Sony, por cierto, es algo que marca profundamente al juego, que cuenta la historia de una comunidad de robots cuya nave espacial es atacada y en la que el único individuo que queda en pie y sano (el Astro Bot que manejamos) debe rescatar a todos sus amigos por una decena de planetas, en los que deberá explorar, resolver puzles y combatir criaturas. El hecho de que los personajes remeden a los grandes personajes de Sony (Kratos, Alloy, Ellie, Jak…) y de que la propia nave sea una PlayStation ha suscitado algunas críticas, que señalan el excesivo corporativismo del juego. Con todo, que un juego tan pensado para el disfrute puro se corone como el mejor del año ha sido una alegría para la comunidad gamer.
Desde hace varios años, la gala hace de gran evento del mundo interactivo, sirve para anunciar los juegos que marcarán los próximos meses. Entre los tráilers que más expectación han causado está The Witcher IV, el esperadísimo juego de CD Projekt RED en el que por primera vez en la saga la protagonista será una mujer: Ciri, la compañera del protagonista en los anteriores juegos; y el nuevo juego de Naughty Dog (creadores de The Last of Us y Uncharted): un juego de ciencia ficción llamado Intergalactic: The Heretic Prophet. En la gala hubo incluso actuaciones musicales como la de Snoop Dogg y la promocional de lo nuevo de El juego del calamar.
De todos modos, el juego más esperado del año que viene tiene nombre y apellidos. De hecho, The Game Awards cuentan con un premio a Juego más esperado del año que viene que, en esta edición, ha recaído (como no podía ser de otra manera) en Grand Theft Auto VI. La secuela del producto cultural más exitoso de la historia (GTA V ha generado más de 8.600 millones de euros), y cuyo desarrollo ha costado casi 2.000 millones, caerá como un meteorito sobre la Tierra en otoño de 2025 para poner patas arriba una industria que el año pasado genero 180.000 millones de euros en todo el mundo. Bueno, no nos engañemos: GTA VI pondrá patas arriba al mundo entero.
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