Envidia, ambición, celos, ansiedad, miedo, ganas de poder... En un contexto cambiante, repleto de incertidumbres tanto a nivel laboral como a nivel social las emociones desagradables ponen a prueba la capacidad de adaptación y la fortaleza emocional. Aprender, adaptarse y crecer a partir de las zancadillas que pone la vida es la respuesta ante las situaciones o los contextos que a menudo nos sobrepasan. Y ahí es donde entra en juego la resiliencia que, tal como asegura la psicóloga Beatriz Gil Bóveda , Fundadora & CEO de Psique Cambio , no es algo con lo que se nace sino que se puede cultivar y entrenar. «No se trata de evitar las dificultades, sino de enfrentarlas con herramientas que nos ayuden a salir fortalecidos», aclara. Por eso la experta comparte las siete habilidades que ayudan a cultivar la resiliencia emocional en un contexto cambiante y acelerado.1. Acepta tus emocionesPermitirnos sentir tristeza, miedo o frustración es el primer paso para procesar lo que vivimos. La autocompasión es clave: tratarte con amabilidad en lugar de exigencia te ayuda a avanzar.Cómo hacerlo: Si estás sintiendo emociones intensas, tómate un momento para respirar profundamente y aléjate de las pantallas. Puedes repetir frases como: «Es normal sentir esto y lo superaré paso a paso».2. Encuentra lo positivo incluso en las dificultadesDurante la pandemia, muchas personas redescubrimos pequeñas alegrías: cocinar en casa, conectar con nuestras familias y amigos, o disfrutar de la tranquilidad de un paseo al aire libre. Centrarse en lo positivo, por pequeño que sea, fortalece nuestra resiliencia y nos ayuda a mantener una perspectiva equilibrada.Cómo hacerlo: Antes de dormir, reflexiona sobre tres cosas buenas que ocurrieron durante tu día. Este hábito refuerza la gratitud y te entrena para ver oportunidades incluso en los retos. También puedes llevar un diario de gratitud enfocándote en diferentes temas (relaciones, logros personales, experiencias que hayas disfrutado…).3. Mejora tus capacidades para resolver problemasIgualmente lo vivido en la pandemia demostró la importancia de la capacidad de resolución de problemas, ya sea adaptándonos al teletrabajo, reorganizando nuestras rutinas o buscando nuevas formas de mantenernos conectados. Dividir los retos u objetivos en pasos pequeños y prácticos es clave para superarlos.Cómo hacerlo: Cuando enfrentes un problema, escríbelo y divide la solución en tareas concretas y alcanzables. Enfócate en una tarea cada vez para evitar sentirte estresado.«La resiliencia es como el sol tras la tormenta: siempre está ahí, esperando su momento para volver a brillar» Beatriz Gil Bóveda Psicóloga y CEO de Psique Cambio4. Invierte tiempo de calidad en tus relaciones Una red de apoyo fuerte no solo alivia el peso de las crisis, sino que también nos da fuerza para seguir adelante.Cómo hacerlo: Dedica tiempo a fortalecer tus relaciones, ya sea con llamadas, videollamadas, mensajes o planes.5. Aprende a aceptar lo que no puedes cambiar Hay situaciones fuera de nuestro control. Aceptar lo que no puedes cambiar te permite redirigir tu energía hacia lo que sí está en tus manos, como nuestro bienestar y nuestras acciones cada día.Cómo hacerlo: Haz una lista de las cosas que puedes controlar y enfócate en ellas. Repite el mantra: «Dejo ir lo que no puedo controlar».6. Prioriza tu autocuidadoDebes ocuparte y cuídate a ti primero si quieres cuidar y estar para los demás. Una alimentación equilibrada, ejercicio regular y descanso son fundamentales para fortalecer nuestra resiliencia.Cómo hacerlo: Establece una rutina diaria que incluya tiempo para cuidar tu cuerpo y tu mente. Prueba la meditación, técnicas de relajación progresiva, el yoga, sal a dar caminatas…y otras actividades que disfrutes. Te ayudará a reducir el estrés, y mejorar tu bienestar emocional.7. Encuentra tu propósito en las dificultadesTransformar los momentos difíciles en oportunidades para aprender y crecer es una de las características principales de las personas resilientes.Cómo hacerlo: Pregúntate qué aprendizajes puedes extraer de cada dificultad. Por ejemplo, si has hecho un cambio importante, reflexiona sobre cómo eso te ha hecho más fuerte o te ha ayudado a valorar aspectos que antes dabas por sentado. ¿Cómo me ha hecho más fuerte esto? ¿Qué puedo aprender de esto? Ayudar a los demás en tiempos difíciles también puede ser una fuente positiva de propósito.Noticias relacionadas estandar No Déficit de contacto con la naturaleza: qué pasa en la mente y en el cuerpo cuando uno se aleja del verde Raquel Alcolea estandar No La técnica de la flecha descendente que desafía a los pensamientos negativos Juan José RodrigoCuando estamos en medio de la tormenta, es fácil sentir que no podremos salir adelante. Sin embargo, la resiliencia enseña, según explica Gil Bóveda, que aunque no podamos controlar todo lo que nos sucede, sí podemos decidir cómo responder. Casi todo en la vida, con tiempo, apoyo y determinación, es superable. Recuerda que las tormentas siempre pasan, y que dentro de ti tienes la capacidad de reconstruir, aprender y crecer.Cultivar estas siete habilidades prepara para los retos del presente, y también supone un entrenamiento para construir un futuro más fuerte y consciente. Porque, como concluye la psicóloga, la resiliencia «no es solo sobrevivir, es aprender a vivir, a ponerle vida a la vida, incluso en los momentos más difíciles».
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