24 horas en Lugo: de las murallas romanas mejor conservadas del mundo a su impresionante catedral

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Sabemos que es difícil arrebatarle a Barcelona, Granada o Sevilla el liderazgo de las ciudades más visitadas de España, pero cuando descubras la riqueza histórica, patrimonial y gastronómica de Lugo entenderás por qué esta ciudad gallega es perfecta para disfrutarla de manera cómoda y tranquila durante un intenso fin de semana. Pequeña, pero con una gran historia a sus espaldas, Lugo sigue siendo una de las grandes desconocidas. Y eso que cuenta con una de las joyas arquitectónicas más destacadas del planeta: su muralla romana, la única que se mantiene totalmente intacta en el mundo y que ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Una de las ciudades más antiguas de España​

Descubrir los encantos de Lugo implica poner el foco en su magnífica muralla, la joya de la ciudad y el mejor reflejo de su identidad. Su fama se la debe a su impecable estado de conservación, a pesar de sus 17 siglos de antigüedad. Y empezamos cruzando la muralla lucense por una de las diez puertas que dan acceso al casco histórico: Porta Miñá o del Carmen, de finales del siglo III, de todas es la que mejor mantiene su estado original. A partir de aquí toca pasear por su calles empedradas e ir descubriendo los ecos del pasado romano. Eso sí, no pierdas la ocasión de subir a lo alto de la muralla en un recorrido en el que podrás disfrutar de las mejores vistas. Durante el paseo te irás encontrando con 71 imponentes torres (de las 85 que había originalmente).

Plaza do Campo​

En pleno centro histórico está la plaza más antigua y más bonita de Lugo. De origen medieval y porticada, tiene forma triangular y en ella se encuentran distintas casas en estilo barroco que construyeron los ricos comerciantes de la zona. En centro también verás una fuente con una estatua dedicada a San Vicente Ferrer. La zona se la conoce popularmente como "la calle de los vinos" y es el lugar perfecto para tomarte un tente en pie en algunas de sus terrazas.

La catedral de Santa María de Lugo​

Muy cerca de la Plaza do Campo se encuentra la catedral, reconocida como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, es una de las visitas imprescindibles de la ciudad. No es una de las más conocidas de nuestro país, a pesar de ser uno de los edificios más interesantes del románico gallego. Construida entre 1129 y 1273, sobre una iglesia de principios del siglo I, cuenta con varios tesoros como la figura de Cristo en Majestad, el retablo mayor, el Coro y el pórtico románico de la zona norte.

La Plaza Mayor​

Recorriendo las calles de Lugo llegarás hasta esta plaza, amplia y arbolada, en la que se encuentran algunos de los edificios más vistosos y elegantes del casco viejo, como la Casa do Concello (el Ayuntamiento), que es una de las obras barrocas más importantes de Galicia, y el Convento de los Franciscanos. En la época medieval es donde se celebraba un importante mercado.

El puente romano o puente viejo​

Y a pesar de todo lo que has visto, todavía te queda mucho por descubrir. Y nada mejor que disfrutar de un agradable paseo por este puente peatonal que cruza el río Miño. De 104 metros de longitud y 4 metros de ancho, es uno de los lugares más tranquilos y con más encanto. Su construcción se remonta a la época romana aunque sufrió varias remodelaciones durante los siglos XII, XIV y XVIII.

Las termas romanas​

Y seguimos haciendo un recorrido por la historia romana de la ciudad descubriendo las termas de Lucus Augusti, que además se encuentran muy cerca del puente. Estos restos de un antiguo balneario romano del siglo XV a. C, han sido declarados Monumento Histórico-Artístico. Cuentan con distintas estancias, aunque la mejor conservada es el apodycterium o vestuario. Actualmente forman parte del Hotel Balneario de Lugo, pero se pueden visitar.

Para comer bien, a Lugo​

Dicen que Lugo es uno de los mejores lugares de España para disfrutar de tapas gratis y abundantes, pero no te puedes ir sin descubrir también lo que esconde entre sus fogones. Y es que, como en otras localidades gallegas, a la hora de comer, Lugo no defrauda. Platos famosos como el delicioso pulpo a la gallega, el lacón con grelos o los callos con garbanzos, pero también te aconsejamos probar un plato tradicional, muy unido a la cocina de Lugo y a las festividades navideñas: el capón de Vilalba.

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